La Caja de Extremadura prevé alcanzar durante el próximo año 2011 un "resultado similar" al conseguido durante este año 2010, lo que le permitirá "contribuir de manera notable" a fortalecer la posición del SIP en el que se ha integrado esta entidad extremeña.

Unos resultados que la Caja de Extremadura prevé conseguir a pesar del "adverso entorno macroeconómico de la fuerte competencia, de la disminución de márgenes prevista, y del esfuerzo dedicado a la cobertura de riesgos".

Para alcanzarlo, la entidad se verá impulsada por las "importantes sinergias" que se alcanzarán "mediante la racionalización y la optimización de sus estructuras, así como la aplicación de las mejores prácticas".

Así se ha puesto de manifiesto en la Asamblea General Ordinaria que Caja de Extremadura ha celebrado en Plasencia, y en la que se han presentado las líneas de actuación de la entidad para el próximo ejercicio.

En esta asamblea, el presidente de Caja de Extremadura, Víctor Bravo, y el director general, Miguel Ángel Barra, han realizado un análisis de las previsiones de evolución de la entidad para el próximo año tanto en la parte del negocio como en la del modelo institucional.

El reto histórico

Un análisis en el que se ha resaltado el proceso de integración protagonizado por la entidad, así como su puesta en marcha a primeros de año, como el "reto histórico" al que tendrá que enfrentarse en el horizonte más inmediato.

En su exposición ante los consejeros generales, Víctor Bravo ha destacado que a punto de acabar el año se puede anticipar que 2010 ha sido un ejercicio "satisfactorio" para la entidad, "pese a la actual situación de crisis económica y de menor crecimiento".

Así, ha destacado que la actividad desarrollada por la caja "sigue dando muestras de fortaleza", a pesar del complejo entorno, con una inversión crediticia que se sitúa en septiembre de 2010 en 5.628 millones de euros y una captación de recursos ajenos que alcanza un volumen de 6.276 millones de euros.

Por eso, Bravo ha señalado que la caja continúa presentando unos "niveles destacados de rentabilidad, solvencia, eficiencia y liquidez" que la sitúan entre "los primeros puestos del sector de las cajas de ahorros españolas".

Sin embargo, ha señalado que el hecho de "mayor trascendencia del año en la entidad", y "el mayor de estas dimensiones en su historia", ha sido su integración en un Grupo Financiero constituido por Caja del Mediterráneo, el Grupo Cajastur CCM y Caja Cantabria.

Una alianza que, según ha explicado Bravo, ha permitido crear la tercera entidad del sector de cajas de ahorros y uno de los cinco mayores grupos del sistema financiero español, con unos activos superiores a los 135.000 millones de euros, un volumen de negocio en torno a 160.000 millones de euros, un ratio de solvencia de 12,1% y un Tier 1 del 9,3%.

Se trata de unos indicadores que sitúan al grupo "entre los primeros del sector por solvencia", y además "garantizan la fortaleza del proyecto y permite anticiparse al cumplimiento de los nuevos requisitos regulatorios impuestos por Basilea III", ha explicado.

Una integración, ha subrayado, Víctor Bravo, "como fórmula operativa" para llevar a cabo la actividad financiera de la entidad y "conseguir la capitalización adecuada de la forma más eficiente", pero también "como un nuevo modelo donde prevalezca el carácter social y de servicio a la comunidad".

Un modelo que "responda a una nueva forma de cumplir con sus principios fundacionales", con su razón de ser como caja de ahorros, "con los cambios en la forma de prestar sus servicios, o de atender sus compromisos y obligaciones con clientes y empleados", ha explicado.

La integración

Así, el presidente de Caja de Extremadura ha añadido que el principal objetivo es "conseguir una adecuada integración que logre el mejor y más adecuado desarrollo de la actividad empresarial", así como "obtener los resultados más brillantes prestando los mejores servicios a sus clientes".

Estos resultados que permitirán que la caja "siga cumpliendo sus principios fundacionales adaptados a los nuevos tiempos, incrementar los recursos dedicados a su Obra Social y reafirmar de nuevo su compromiso con Extremadura y con todos los extremeños", ha señalado Bravo.

En su intervención, también ha destacado que para alcanzar una "senda de crecimiento a corto plazo basado en la solvencia, eficiencia y rentabilidad" como se pretende, será necesario "continuar con el reto de diversificar el negocio incrementando considerablemente su presencia en el sector empresarial", ha señalado.

Por su parte, el director general de la entidad, Miguel Angel Barra, ha presentado un detallado análisis del enfoque económico y financiero para 2011, perfilando el entorno macroeconómico, la evolución de los tipos de interés y las perspectivas de negocio en el sistema financiero, en el que desenvolverá su actividad Caja de Extremadura.

Finalmente, el presidente de Caja de Extremadura ha reafirmado el compromiso de la entidad con la sociedad extremeña, "colaborando, decidida y enérgicamente, en el desarrollo económico y social de la región", así como "facilitando el acceso a los servicios financieros al mayor número de personas posible, con más atención, en los colectivos con mayores dificulta.