En la madrugada de hoy ha finalizado el denominado horario de verano, que dio comienzo en el mes de marzo, y ha dado paso al de invierno (a las 3 de la madrugada hubo que retrasar una hora el reloj), que estará vigente durante los próximos cinco meses. El cambio de hora está pensado para ahorrar energía en los hogares y en las empresas, y según las cifras que maneja el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE), el consumo doméstico puede verse reducido un 5% en la factura de la luz, lo que traducido a Extremadura supone en torno a 3 millones de euros hasta el mes de marzo.

El ahorro es, según las compañías eléctricas aplicable en cualquiera de los dos cambios horarios, ya que si ahora habrá menos horas de sol y luz se enciende antes, también es cierto que las personas se van a dormir antes que cuando hay más horas de sol. Además, a estas previsiones para los hogares, hay que sumar en torno al 3% de ahorro energético en el sector del comercio y servicios.

En Extremadura, las compañías eléctricas suman 550.000 clientes, cerca de 500.000 de ellos domésticos. Cada hogar, según los datos de las empresas distribuidoras, paga una media de 50 euros cada dos meses, que es como se cobran las facturas, y el consumo anual oscila entre los 3.000 y los 3.700 kilovatios. Esto supone que, teniendo en cuenta esas previsiones del IDAE, en cada factura los clientes domésticos de la región ahorran en torno a 2,5 euros cada uno, lo que supone unos 1,2 millones en el conjunto de los hogares y cerca de 3 millones de euros durante el periodo que dura el horario de invierno (octubre-marzo).

QUE DICEN LAS ELECTRICAS La demanda de energía "se simultánea tanto en el horario de verano como en el de invierno", aclaran fuentes de Iberdrola en la región, ya que "por ejemplo antes se encendía el aire acondicionado, ahora lo hace la calefacción, y si hasta ahora la gente encendía la luz más tarde en sus casas, también es cierto que ahora se irán a dormir antes, pese a que enciendan la luz más temprano. La cuestión es la misma, los cambios de horario están pensados para eso".

Esos mismos argumentos exponen fuentes de Sevillana-Endesa, que cuenta en la región con 242.213 clientes, de los que 215.776 son domésticos. Estos, explican, pagan 0,08 euros por kilowatio/hora, pero "todo varía según la cuota de potencia instalada", matizan. En general, los clientes de esta eléctrica consumen en la región 250 kilovatios/hora cada mes.

Las cifras de ahorro traducidas a nivel nacional, supone más de 60 millones de euros para el conjunto de los hogares, dado que el consumo medio de una familia española es de 3.200 kilovatios/hora, lo que deja una media de ahorro de 6 euros por hogar.

El cambio de hora comenzó a generalizarse, aunque de manera desigual, a partir de 1974 entre los países miembros de la Unión Europea, aunque se aplica como directiva desde 1981 y está vigente con carácter indefinido desde el 2001. En el 2007, la comisión debe emitir una nueva directiva, la décima.