Un total de 11.864 jóvenes abandonaron Extremadura entre 2011 y 2016, según el director del Instituto de la Juventud de Extremadura (IJEx), Felipe González, a los que se sumarían más de 2.000 en 2017, de acuerdo con los datos facilitados por el diputado del PP, Luis Francisco Sánchez.

Este recordó que la tasa de paro juvenil en la región es del 43%, la más alta del país, al igual que la de jóvenes que sufren pobreza o riesgo de exclusión social, o la de quienes presentan sobrecualificación en su trabajo (un 65%).

Esta falta de oportunidades que ofrece Extremadura es la que, a su juicio, ha provocado que en 2017 más de 2.000 jóvenes se hayan marchado de la comunidad, lo que supone «la mayor fuga de jóvenes de los últimos años», según Sánchez.

El presidente del IJEx indicó que la Junta no dispone todavía de este dado, porque aún no ha sido publicado, y dijo que el hecho de que los jóvenes extremeños tengan que marcharse tiene mucho que ver con las consecuencias de políticas aplicadas por el PP, como la reforma laboral, la reducción en I+D+i o los recortes en educación.

Felipe González destacó que «sin población joven esta región no tendrá futuro», por lo que evitar que se marchen y favorecer su retorno es una «batalla compleja», reconoció, pero esencial para el desarrollo de la región.

El responsable del IJEx expuso las distintas políticas que lleva a cabo la Junta para abordar este problema, algo que hace de una forma transversal, según dijo.

Así, citó el VI Plan de Juventud, con más de 270 medidas, las ayudas al emprendimiento, al asociacionismo joven, las subvenciones del Sexpe a la contratación indefinida de personas retornadas o el apoyo a las empresas que vuelven.

También se refirió a la línea de microcréditos, a las facilidades para abonar las matrículas universitarias, a las ayudas al deporte o a la creación. Explicó a la vez que se llevan a cabo actuaciones con otras administraciones, como las diputaciones provinciales, para fijar la población joven a los municipios.

El PP criticó que el IJEx se haya convertido en un organismo «residual», ya que solo contará con un presupuesto de 1,5 millones de para 2018 y el Plan de Retorno de Capital Joven, con una partida de 3.500 euros.