Seis de marzo. Es la fecha en la que Extremadura comenzará a movilizarse contra el pensionazo . Así lo confirmaron ayer en Mérida los dirigentes regionales de CCOO y UGT, Julián Carretero y Francisco Capilla, donde informaron de la celebración de dos concentraciones simultáneas en Cáceres y Badajoz que forman parte de la ola de protestas que se sucederán en diferentes ciudades del país del 22 de febrero al 6 de marzo.

Para animar a los trabajadores a participar en las movilizaciones de la región, Capilla y Carretero asistirán también durante las próximas semanas a diversas asambleas que se celebrarán en los centros de trabajo. El objetivo es explicar a los obreros el posicionamiento de ambos sindicatos con respecto a esta reforma, que consideran "regresiva, insolidaria, equivocada e imprudente".

Los dos líderes coincidieron en destacar que para paliar la "caja" de la Seguridad Social, las medidas pasan por crear más empleo y adelantar la edad de incorporación al mercado laboral, que actualmente está en 28 años de media. Carretero planteó además un aumento en las bases de cotizaciones, y recordó que España es el segundo país europeo que tiene la edad de jubilación real más alta.

El líder de CCOO señaló además que la reforma es "especialmente negativa" en el caso de Extremadura, debido a que la región cuenta con el mayor índice de temporalidad de toda España (en torno al 36%) y a que más de 65.000 personas están incluidas en un régimen de cotización especial, el Agrario (pese a que el Gobierno central ya se comprometió a integrarlos en el General en el 2006, ha recordado).

Por su parte, el líder de UGT, Francisco Capilla, indicó que el Ejecutivo se ha "equivocado" en el cómo, el cuándo y el dónde presentar esta medida "insolidaria, regresiva e imprudente", y consideró que este asunto debería tratarse en el Pacto de Toledo, "porque las reformas del sistema público de pensiones deben ser acordadas y consensuadas con los agentes sociales".

Así mismo, también lamentó que los recortes de gastos que se plantean en momentos de crisis "siempre recaen en el bolsillo de los mismos, de los trabajadores". Y resaltó que en una situación como la actual, "hay que hacer planteamientos más serios, que deben ir en la línea de búsqueda del consenso", y sobre todo, "es necesario generar más actividad".