En los últimos tiempos, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han desarrollado algunas operaciones de calado antidroga en la región.

Durante el mes de marzo de este año, la Guardia Civil llevó a cabo en Plasencia la llamada operación Nemo , en la que se logró el mayor alijo de droga incautado en esta localidad, con más de 62,5 kilos de hachís aprehendidos, además de nueve detenciones, la incautación de más de media docena de vehículos de gama alta y más de 10.000 euros en metálico.

Esta había sido la mayor actuación antidroga que había tenido lugar en Extremadura en lo que va de año hasta que el pasado jueves, en la operación Bacalaho desarrollada en las provincias de Badajoz y Valencia, se detuvo a tres personas y se incautaron más de 200 kilos de cocaína ocultos en el brazo metálico de una máquina retro-excavadora. En este caso, la droga procedía de América del Sur e iba a ser enviada a distintos países de Europa.

El mismo día, 28 de julio, la Policía Nacional detuvo a doce personas en otra operación contra la droga en la que se intervinieron 2,2 kilos de hachís, procedente de Marruecos, en los registros de dos viviendas de Almendralejo y otra más en Villafranca de los Barros.

Sólo en el primer semestre del año pasado, la cantidad incautada de esta sustancia ascendía a 340 kilos, el doble de lo que se intervino a lo largo de todo el 2003. En este periodo se desarrollaron dos importantes operaciones, en las que se confiscaron 96 kilos en la zona de Llerena y 240 en Badajoz, en la acción policial más importante contra el tráfico de drogas que ha tenido lugar en la región.

Con respecto a las incautaciones de heroína, cocaína y éxtasis, un informe del Ministerio de Interior señalaba que a lo largo del 2003 éstas se habían duplicado en la región con respecto al año anterior. A lo largo de ese año, la Guardia Civil y la Policía Nacional lograron recuperar en Extremadura 5,44 kilos de cocaína, 5,58 kilos y 2.400 unidades de éxtasis.

Estas cifras parecen indicar que Extremadura se ha convertido en una de las rutas elegidas por los narcos para llevar la droga al norte.