La Consejería de Desarrollo Rural de la Junta de Extremadura ha aprobado definitivamente el listado de las zonas que se consideran "de alto riesgo de incendios forestales" en Extremadura. El documento, publicado ayer en el Diario Oficial de Extremadura (DOE) y puesto en marcha a instancias del Ministerio de Medio Ambiente --aunque ya se preveía en la normativa extremeña--, incluye trece áreas "prioritarias de defensa" en las que hay 202 municipios, 136 de ellos de la provincia de Cáceres y los 66 restantes de la de Badajoz.

Se trata, según explicaba ayer mismo la Consejería de Desarrollo Rural, de zonas prioritarias por, entre otras cosas, su valor económico, medioambiental o social, como es el caso de los espacios protegidos o de masas boscosas "que necesitan mayores medidas de protección frente a los incendios". De hecho, estas 14 áreas delimitadas en la resolución que publicó ayer el DOE contarán con sus propios planes de defensa contra el fuego.

ZONAS AFECTADAS En concreto, las zonas incluidas forman parte de las comarcas de Las Hurdes, Vera-Tiétar, Villuercas, Valencia de Alcántara, Sierra de Gata, Jerte-Ambroz, Monfragüe, Sierra de San Pedro, La Siberia, Montánchez, Sierras Centrales de Badajoz, Los Ibores y Sierras de Siruela-Zarza Capilla.

Por lo que se refiere a los límites exactos afectados por la declaración de alto riesgo de incendios, la Consejería de Desarrollo Rural detalla que son 93 términos municipales completos y parte de otras 109 localidades. Aún así, hay que tener en cuenta que en numerosas ocasiones la zona de máximo riesgo de incendios únicamente alcanza a una pequeña parte del municipio en cuestión. Es el caso, por ejemplo, de Alange --sólo los eucaliptales del este del embalse--, Campanario --Sierra de la Capitana y de Bienvenida-- o de las capitales extremeñas, es decir, Cáceres, Badajoz y Mérida, donde sólo hay alto riesgo en la zonas que tocan a la Sierra de San Pedro.

Este paso dado por la Junta responde a la petición realizada a principios de este mes a todas las comunidades autónomas por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, para quien el conocimiento de las zonas con un mayor peligro potencial es un punto fundamental a la hora de prevenir los incendios forestales. De esta forma, el ministerio obligaba a la Junta a acelerar una iniciativa que ya estaba recogida en el Plan de Prevención de Incendios Forestales de Extremadura (Preifex). Sin embargo, este plan, creado por la ley de prevención y lucha contra los incendios forestales, aún está en fase de elaboración.