Ya estaba la Cruz de Guía en la puerta de la iglesia de las Descalzas cuando empezó a llover. Un poco más y el agua hubiera sorprendido a Jesús de la Espina y la Virgen de la Amargura en la calle. La cofradía no quiso arriesgarse y, para desazón de los cientos de devotos que llenaban la plaza López de Ayala, la procesión se suspendió porque las previsiones meteorológicas no eran halagüeñas.

Como eran muchos los que aguardaban optaron por sacar los dos pasos a la puerta y hasta allí se trasladó poco antes de las diez de la noche el grupo Voces Corales de Badajoz, que tenía previsto cantar en la escalinata de la catedral.

En la parroquia de San Fernando fueron más atrevidos y aunque las primeras gotas provocaron cierto revuelo, finalmente la cofradía decidió sacar al Cristo de la Angustia y la Virgen de la Misericordia. Su intención era llegar hasta Cuatro Caminos y no cruzar el río.

Pendientes del cielo estarán también hoy las tres cofradías que procesionan. Siete pasos surcarán esta noche las calles del casco antiguo de Badajoz: los cuatro que salen de la parroquia de Santo Domingo, los dos titulares de la cofradía de San Andrés y, de madrugada, Jesús del Prendimiento, de la Concepción.

Desde la iglesia de la plaza de Cervantes, volverá a salir uno de los mejores pasos del Descendimiento que existen en España, con más de 2.500 kilos de peso, alzado por 50 costaleros. El hermano mayor, Antonio Rodríguez Tapia, tiene claro que el momento más espectacular es la salida, además de la presentación ante la Soledad y el "revirado" desde Arias Montano a la calle Bravo Murillo.

Cuando la hermandad de San Andrés no hayan llegado aún a la plaza de España, saldrán de la parroquia de Santo Domingo sus cuatro pasos. Esta cofradía fue la primera que incorporó mujeres de nazareno y también, hace ya nueve años. Este año María Santísima del Mayor Dolor saldrá de su iglesia llevando en su cintura el fajín del general Manuel Carracedo, que se ha colocado en otras dos ocasiones, pero que ahora tiene en herencia.

Y a la una de la madrugada saldrá Jesús del Prendimiento, que se adentra en el corazón del casco viejo.