Un interno de la prisión de Badajoz está hospitalizado, desde el pasado martes, afectado por un caso de legionela, según han confirmado a EL PERIODICO EXTREMADURA el director de la cárcel pacense, Antonio Quintana, y la Dirección General de Instituciones Penitenciarias.
Este caso de legionela fue detectado por el personal sanitario del Hospital Perpetuo Socorro, cuando atendió a un recluso que llegó con fiebre, derivado por el médico de la penitenciaría. El paciente se sintió mal y fue atendido por el facultativo de la prisión, quien al detectar la fiebre y no poder establecer la causa de la misma, decidió derivarlo al centro hospitalario.
Una vez internado, se le hicieron análisis y éstos determinaron la presencia de la legionela. Ante esta situación, el equipo médico hospitalario informó al centro penitenciario y desde éste, al Servicio Extremeño de Salud y a Instituciones Penitenciarias, según manifestó Quintana.
El paciente quedó ingresado en el hospital pacense y allí permanece, donde evoluciona favorablemente de su enfermedad. Quintana señaló que se trata de una situación delicada y que no se debe generar una excesiva alarma, porque el recluso "se encuentra bien" y "no se ha detectado ningún otro caso, a pesar del tiempo transcurrido". Según sus palabras, "no es una cuestión de emergencia por tratarse sólo de un preso afectado", y dado que se cumplió con el protocolo establecido por las autoridades sanitarias para estas situaciones.
Aún se desconoce el origen del posible foco de legionela. Las autoridades sanitarias a tomaron muestras en distintos puntos de la prisión y han realizado análisis de los posibles focos de infección, como depósitos y redes de agua o aire acondicionado, entre otros. Asimismo, se ha procedido a la desinfección establecida conforme a la legislación vigente. Antonio Quintana aseguró ayer que "aún no sabemos los resultados, estamos a la espera de que nos digan de donde surgió la infección".
La última revisión de las instalaciones del aire acondicionado de la prisión de Badajoz se hizo en agosto pasado y fue realizada por una empresa encargada de la prevención de la legionelosis y del mantenimiento del sistema, "y no detectaron nada".
La dirección del centro penitenciario ha querido transmitir un mensaje de tranquilidad a los familiares de los presos. "Es importante que sepan que es un brote aislado, que la situación de la prisión está controlada, es de tranquilidad y que tienen su teléfono de atención al público por si quieren hacer alguna consulta".
