Un vecino de Navalmoral de la Mata, de 68 años, ha sido atendido por efectivos sanitarios tras sufrir hoy un golpe de calor, por lo que ya son dos las personas que, desde el pasado 1 de junio, han precisado asistencia médica como consecuencia de las altas temperaturas que se registran en Extremadura.
Desde que se activara el Plan de Vigilancia y Prevención de los Efectos del Exceso de Temperaturas sobre la Salud, a principios de este mes, el Servicio Extremeño de Salud ha atendido a dos personas; la primera fue en Don Benito (Badajoz) en los primeros días.
En esta localidad pacense, un hombre de 63 años sufrió un golpe de calor leve que requirió su ingreso hospitalario, si bien fue dado de alta horas después.
Esta mañana, en una vivienda de Navalmoral de la Mata, un varón de 68 años ha precisado asistencia médica por golpe de calor, aunque su estado de salud evoluciona favorablemente, según ha informado hoy el consejero de Sanidad, José María Vergeles, minutos antes de participar en un encuentro nacional de Neuroradiología.
Vergeles ha afirmado que en estos días la región se encuentra en el nivel 3 por altas temperaturas, que es el máximo nivel de riesgo, por lo que durante los próximos cuatro o cinco días se superarán los umbrales de temperaturas máximas y mínimas.
"Esto quiere decir que las noches no permiten refrescar lo que durante el día se calienta", ha agregado.
El consejero ha recomendado a los ciudadanos que no salgan de casa y no realicen ejercicio en las horas de mayor calor, que se protejan del sol, intenten estar bien hidratados y utilicen ropas claras, lo que ha considerado como "medidas de sentido común".
A su juicio, hay que informar de ello también a los turistas, ya que algunos aprovechan esas horas calurosas para ir a visitar los monumentos, puesto que es cuando menos afluencia de gente hay.
Vergeles ha explicado que los síntomas de un golpe de calor pueden ser leves como la necesidad de beber, u otros como sensación de desvanecimiento o agotamiento.
