"Ha sido de puta madre, una gran experiencia", respondió el soldado de Badajoz Marco Antonio Laguna Torvisco, que resultó herido en una mano en un ataque con granadas en Irak, cuando se le preguntó en qué estado volvía. Acababa de encontrarse con su familia: su madre, nerviosa, y sus hermanos. Interrogado sobre su sensación ya en casa, dijo que "muy bien, después de cuatro meses".

Dijo que se encuentra "estupendamente", que se ha "recuperado perfectamente", que "estaría dispuesto a volver otra vez" y que los cuatro meses "no se han hecho largos". Añadió que la situación "se vive en el momento" y que no deseaba recordarlo más, a la vez que recordaba a sus compañeros. El capitán Vilches, también herido, llegará el día 28.