La Feria Nacional del Queso de Trujillo (Cáceres), que se ha celebrado del 29 de abril al 2 de mayo en la ciudad, ha generado un volumen de negocio de aproximadamente un millón de euros, según un muestreo realizado entre una veintena de expositores del certamen.

De acuerdo a estos datos, los 108 espacios expositores distribuidos en la plaza Mayor facturaron una media de 6.000 euros durante los cuatro días de la feria, si bien los expositores con mayor superficie de exposición o aquellos que se encuentran ubicados en esquina llegaron, en algunos casos, a duplicar esta cifra.

Así, la venta de quesos por piezas enteras generó un volumen de negocio de aproximadamente 650.000 euros, lo que supone un ligero incremento con respecto a las cifras registradas en la edición anterior, según recoge la organización del certamen.

A esta cantidad hay que añadir el negocio generado por la venta de tickets para las degustaciones que, a falta de una cifra oficial, podría situarse en torno a los 150.000 euros.

Por su parte, la comercialización de los espacios expositores y los servicios auxiliares habrían generado una cifra de más de 100.000 euros, lo que elevaría el volumen de negocio global de la feria a casi el millón de euros.

Al negocio generado por este certamen monográfico en cuanto a venta de quesos hay que añadir los beneficios generados por la feria en la ciudad durante el puente festivo del primero de mayo y que, en un balance provisional, arroja un volumen de casi cinco millones de euros adicionales.

La celebración del certamen permitió a los establecimientos hoteleros colgar el cartel de lleno durante cuatro días en los que Trujillo recibió a casi 200.000 visitantes procedentes, en su mayor parte, de Extremadura, Madrid, Andalucía, Castilla La Mancha, Castilla y León y Comunidad Valenciana.

En coincidencia con la celebración de la feria, la Oficina de Turismo de Trujillo registró un número de visitas muy superior al del año anterior, con un incremento de casi el 25% de los turistas nacionales, aunque el dato más significativo fue el aumento del número de extranjeros, que triplicó al de la edición de 2015.