Ningún tribunal extremeño ha juzgado jamás a un pirómano". Así lo ha confirmado el fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, Jorge Sena, quien no obstante defiende que tanto la actividad judicial como la policial contra ellos en la comunidad de Extremadura "es incansable".

El hecho de que ningún pirómano haya llegado nunca a juicio en Extremadura, pese a esa "incansable actividad" referida, "no se debe a falta de ganas, está motivado simplemente en que resulta muy difícil una acusación clara contra los autores de estos delitos, aunque resulten detenidos, porque las pruebas son tan sutiles que siempre quedan impunes", explica Jorge Sena.

Es habitual que la investigación conduzca a inculpar a un incendiario, pero finalmente siempre es muy difícl hallar pruebas válidas a nivel judicial. "En los casos en que se produce una detención y las pruebas son incriminatorias, finalmente suele quedarse en un delito de incendio imprudente, y muy probablemente por el tipo de imprudencia, si no es demasiado grave, se quedará en una falta de imprudencia", asegura el fiscal jefe.

No obstante, Sena insiste en afirmar que en Extremadura existe una "intensa persecución" contra los pirómanos, y como prueba de ello citó el caso del detenido por el último incendio en la sierra de Montánchez. En este caso actuó la fiscal Marta Abellán, que se encontraba de guardia el día en que se produjo el incendio y la detención del presunto autor. Esta explicó que en este caso si se ha identificado al autor, se le ha detenido y, cosa poco habitual, se ha decretado su ingreso en prisión provisional.