A la espera de conocer qué pasará con el último auto del juez Garzón, mientras las asociaciones para la recuperación de la memoria histórica se enganchan a la esperanza de resolver heridas del pasado, la iniciativa del juez sigue ofreciendo puntos de vista e interpretaciones variadas. El historiador extremeño Francisco Espinosa es uno de los expertos propuestos para asesorarle.

-- ¿Cómo se ubica la iniciativa de Garzón en nuestro tiempo?

-- En España se lleva ya treinta años, desde finales de los setenta, investigando porque es un proceso largo con etapas muy marcadas, aunque la que más nos suena es la última por la importancia que ha tenido y por su repercusión mediática, desde finales de los noventa. Pero la cosa viene de más atrás, de los años ochenta, cuando surgen las monografías principales sobre el golpe militar y la represión, y luego en los noventa se extiende mucho más y surgen los primeros trabajos de ámbito académico, etc. Lo que supone la iniciativa de Garzón es simplemente crear junto a la verdad histórica una verdad jurídica sobre esos mismos hechos. Era evidente, todos los percibíamos, que la historia iba por un lado y la definición jurídica por otro, si es que iba porque la verdad es que no ha ido. Entonces el juez por primera vez en el auto de septiembre llama a las cosas por su nombre, se habla de lo que ocurrió en aquel momento, se da una interpretación de aquellos hechos, se pone el dedo en la llaga porque supuso una auténtica masacre con un problema enorme de desaparecidos, de desapariciones forzosas, un tipo de crímenes que no prescriben. Va a encontrar mucha oposición como está encontrando, en la propia Fiscalía en ese recurso que ha salido y se supone que habrá más oposición, pero creo que con la marcha que lleva el movimiento de memoria histórica algo se conseguirá.

-- Es consciente, por tanto, de que hay muchas opiniones a favor y en contra. Las asociaciones van a ser un punto de apoyo muy importante...

-- Son fundamentales, de hecho son las que han llevado todo el asunto que ha conducido a la iniciativa de Garzón. Esto viene precisamente por las tres asociaciones que a finales del 2006 pusieron la demanda sobre la desaparición de una serie de personas sobre las que se pensaba que se podría aplicar el concepto de desaparición forzosa. Vamos, que se ha tomado bastante tiempo para pensarlo, que no se crean que esto se le ocurrió en verano estando de vacaciones en agosto, la cosa viene de atrás, es un tema que empezó a finales de los noventa y ha tenido diversas fases por parte del Congreso español, del Parlamento Europeo, en el 2002 y el 2006.

-- Usted ha centrado su trabajo en la provincia de Badajoz y parte de Andalucía, ¿cómo afectará este proceso a la región?

-- Bueno, lo que ocurre es que, dentro de la documentación que se ha enviado a Garzón han ido todos los datos que teníamos sobre la represión en Badajoz, fruto de las investigaciones que yo hice. Eso está dentro de todos los nombres que reúnen las ocho provincias andaluzas y Badajoz, por eso ha ido todo junto. Efectivamente Extremadura es de las regiones principales que será objeto de investigación ahora y de los que plantea el auto de Garzón, por haber sido una de las zonas que sufrió más la represión, en el sentido de que si hay una zona especialmente marcada por los hechos del golpe militar del 36 es precisamente la que sufre la subida del ejército de Africa, el ejército de Franco y ese es el suroeste. Concretamente Badajoz tiene un marcado protagonismo por los hechos que allí ocurrieron, por haber sido una provincia que era en aquel momento la provincia piloto de la reforma agraria, la represión fue especialmente dura, incluso más que otras cercanas y eso la convierte en una provincia que probablemente cuando se sepan los efectos de la represión franquista pues se esté hablando de la desaparición de diez, once o doce mil personas, no sabemos cuántas, pero será una cifra astronómica.

-- Será un placer para usted poder colaborar como experto con el juez Garzón. ¿Ha hablado personalmente con él?

-- Bueno, con él no he hablado personalmente. Sólo nos consta la petición de los abogados de las asociaciones para nuestra colaboración dentro del equipo que va a asesorar en la investigación que se haga. No hemos recibido aún la comunicación de la Audiencia pero vamos- Precisamente una de las posibilidades que da el tener esa experiencia ya larga y haber reunido tal cantidad de documentación, de datos, etc., pues en este momento puede ser útil ahí y supongo, igual en mi caso que en el de otra gente a la que se ha invitado a entrar en esto, pues una de las funciones de la historia en este caso es que si sirve a la justicia pues bienvenido sea.

-- ¿Cuál será el principal obstáculo que se encuentre el juez y el equipo de asesores?

-- Todavía en nuestro país existe una derecha potentísima a nivel general y en el mundo judicial, especialmente fuerte. Yo creo que los problemas ya están surgiendo, hay una respuesta desde que surgió la iniciativa de Garzón, nada más que hay que ver los medios de comunicación, para darse cuenta de la furia que se ha desatado contra ella.