El sector de las franquicias facturó el año pasado casi 100 millones de euros en Extremadura. En concreto, fueron 99,6 millones, lo que supone un ligero descenso respecto al año anterior cuando se 'embolsó' 102 millones. Así lo pone de manifiesto el último informe de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF) y los datos de la asociación extremeña, con los que se confirma que el sector está cada vez más consolidado en el conjunto del país con una facturación de más de 25.000 millones de euros, una cifra que no para de crecer cada año.

En el caso de Extremadura, la facturación ha caído ligeramente aunque el número de cadenas instaladas en la región continúa en ascenso, con cuatro más en el último año hasta alcanzar las 20. La clave del descenso está en una consolidada franquicia extremeña, Dehesa de Santa María, que tras fusionarse con otro grupo empresarial ha abandonado el registro extremeño para establecer su sede en Cataluña, explica Javier Gutiérrez, presidente de la Asociación de Franquiciadores de Extremadura. "Ha habido un descenso importante en solo un año porque era una cadena que funcionaba bastante bien", señala. Pero no ha sido el único factor influyente. Las estadísticas no tienen en cuenta a las franquicias que llevan menos de dos años en el mercado y hay en la región siete nuevas marcas que funcionan con este modelo: Electrocash, Entrevidrio, Corteyjamón.com, Don Lorenzo, Cronicas Carnivoras, Cien Bocca Pizza Cervecerías y Ecoyahona del Ambroz.

Gutiérrez señala que tras el descenso del 3% experimentado en el 2014 está también el equilibrio que se ha producido tras la gran subida de años anteriores y las ayudas extremeñas, "que no han animado a las empresas a franquiciar", lamenta.

IMPULSO Pese a estos inconvenientes, el impulso de este sector en los últimos años ha sido imparable, pasando de los 87 millones facturados en el 2012 con tan solo 10 cadenas franquiciadores a los 99 millones del año pasado con el doble ya de cadenas. Entre 2012 y 2015 la facturación se ha incrementado un 15%, "una subida que no han experimentado otras comunidades". Según los datos del 2013, los últimos, Extremadura contaba con 567 locales franquiciados funcionando, que tenía empleadas a más de 1.300 personas.

La explicación a esta evolución positiva está en la situación económica actual. "Ahora mismo lo que cualquier persona necesita para lanzarse al autoempleo es confiar en una marca cuyo éxito está garantizado y seguir un camino fácil. Se busca autoempleo, baja inversión y a ser posible franquicias que no tengan locales comerciales". Así, el sector espera mantener la tendencia positiva en el futuro. "Con las cifras que estamos viendo, el crecimiento que va haber este año será muy importante sin duda alguna. La gente está apostando por las empresas y se está viendo en el mercado", señala Gutiérrez, que participará junto con otras nueve cadenas extremeñas y de la mano de Avante en la mayor feria de franquicias de Europa, Expofranquincias, que se celebra en Madrid del 23 al 25 de abril.

En el conjunto de todas las comunidades, hay casi 1.200 cadenas franquiciadoras que facturaron el año pasado más de 25.000 millones de euros, un 1% más que un año antes.