La mesa de seguimiento de la enfermedad animal denominada lengua azul, reunida ayer Mérida, sirvió para constatar que la Junta y las organizaciones profesionales agrarias, mantienen su "apoyo" a la vacunación como el método más eficaz para erradicar un mal que, para el sector ovino, no solo supone el freno a la mortandad por esta causa, sino también la garantía de los movimientos pecuarios de cara a la comercialización.

La directora general de Explotaciones Agrarias y Calidad Alimentaria, María Curiel, felicitó a todo el sector por la noticia conocida esta misma semana de la erradicación del serotipo 4 de la lengua azul en todo el país. Asimismo, manifestó su confianza en que la lucha basada en un estricto programa de vacunación, tal y como ha sido el caso del serotipo 4, posibilitará también la erradicación de los serotipos 1 y 8. En este último caso, se está desarrollando una vacunación preventiva en Extremadura.

La Junta reiteró a las organizaciones agrarias que durante la campaña de vacunación ovina, a punto de finalizar, las incidencias comunicadas por los ganaderos de los casos de muerte de ovejas solo suponen el 0,06% de los animales a los que se les ha vacunado. Este porcentaje difiere del que han puesto de manifiesto las opas durante la reunión.