Los agentes de la Guardia Civil de Tráfico en Extremadura han reiniciado la huelga de bolis caídos que ya llevaron a cabo en el 2005. La protesta se inició a principios de diciembre por iniciativa individual de varios guardias, que divulgaron la iniciativa a través de mensajes de móvil. Ahora la medida ha sido apoyada oficialmente por la Asociación Unificada de la Guardia Civil (Augc), que ha lanzado una "campaña de concienciación a los conductores" bajo el lema Enero, en blanco .

Esta nueva movilización encubierta de los guardias --que legalmente no pueden manifestarse ni convocar una huelga-- ha sido provocada, según fuentes de la Augc, por lo que consideran "una tomadura de pelo" del PSOE. Y es que cuando los socialistas estaban en la oposición adquirieron una serie de compromisos relacionados tanto con el asociacionismo en el seno de la Benemérita como con la gestión de la propia Guardia Civil.

El problema, según fuentes de esta asociación, es que casi dos años y medio después de que Zapatero ganase las elecciones generales no se han cumplido estas promesas. A esto se suma el nuevo reparto de la productividad, que consideran "injusto" porque está propiciando que muchos guardias destinados a tareas burocráticas lleguen a ganar 900 euros mensuales más que un agente de carretera.

PROMESAS PENDIENTES Por lo que se refiere a las promesas incumplidas del Ejecutivo socialista, el mismo programa electoral del PSOE recogía las dos más importantes, como son que dejaría de aplicarse el Código Penal Militar a los guardias y que se regularía el derecho de asociación profesional de los agentes. Todo ello acompañado de un proceso de desmilitarización del cuerpo que se llevaría a cabo de forma progresiva.

El segundo eje del malestar de los agentes es el reparto de los pluses de productividad en la especialidad de Tráfico, un asunto en el que se llegó a un acuerdo el año pasado con un importante incremento de fondos. Sin embargo, la distribución de esas cantidades --que pueden alcanzar los 1.000 euros mensuales-- sigue dependiendo de los responsables de cada subsector provincial. Esto ha provocado que "una vez más el dinero se lo queden los agentes destinados a oficinas, que en algunos casos cobran los 1.000 euros mientras algunos agentes de carretera perciben un plus de 100 euros".

La indignación de los guardias ha ido en aumento en los últimos meses y ya a finales de noviembre comenzaron a circular SMS bastante explícitos: "Compañero. A partir del 1/12/06 huelga de bolis. Que no se rían más de nosotros. Basta de mentiras".

YA ES OFICIAL En los últimos días esta convocatoria ha sido refrendada por la Asociación Unificada de la Guardia Civil, que ha lanzado una "campaña de concienciación a los conductores" bajo el lema Enero, en blanco . La metodología de los agentes que secunden la huelga será similar a la que ya han aplicado en las anteriores protestas. Es decir, que centrarán sus esfuerzos en informar y concienciar a los conductores y únicamente multarán los casos más graves.

A la hora de valorar el impacto que podría tener esta campaña de concienciación hay que tener en cuenta que en el 2005 el número de sanciones de tráfico cayó en la comunidad en más de 15.000 (un 22%) a pesar de que la movilización duró poco más de seis meses, lo que supuso un golpe de en torno a 1,5 millones de euros para las arcas de la Dirección General de Tráfico.

En los primeros meses del 2006 las cifras se recuperaron tras el principio de acuerdo en la distribución de la productividad, pero a partir del mes de octubre se ha vuelto a registrar un fuerte descenso del número de denuncias impuestas.

Según los datos que maneja Augc, durante el pasado mes de diciembre --una vez iniciada la protesta a través de los SMS-- los guardias de Tráfico de la provincia de Badajoz acabaron imponiendo entre 700 y 1.000 denuncias menos que en el mismo periodo del año pasado.