EDAD 53 AÑOS

NACIO EN BARCELONA

ESTUDIOS INGENIERO TECNICO DE QUIMICA INDUSTRIAL

TRAYECTORIA POLITICA MILITANTE DEL PSUC DESDE 1972 HASTA 1987. COFUNDADOR DE IC-EV. FUE DIPUTADO EN EL CONGRESO Y EN EL PARLAMENTO CATALAN.

--¿Su encuentro de mañana (por hoy) con el presidente Ibarra responde al deseo de aplacar suspicacias ante la intención de la Generalitat de reformar el Estatuto?

--En primer lugar responde a que esta legislatura en el Estado es un momento histórico de salto de modelo de Estado. Muchas comunidades se plantean reformar sus estatutos, y el Gobierno catalán ha considerado interesante tener intercambios con el resto de gobiernos autonómicos sobre esa cuestión. En ese sentido ya he mantenido reuniones en otras comunidades, y nos parece interesante hacerlo también aquí. Además, también queremos explicar que el cambio que hemos planteado no busca ningún tipo de privilegios, sino tener más instrumentos de autogobierno para hacer frente a los problemas de la gente.

--¿Qué acogida esperan por parte de Rodríguez Ibarra?

--Hasta ahora todas las comunidades han sido muy receptivas, porque es una forma de conocer qué quieren hacer los demás. Estoy seguro que mañana (por hoy) la acogida será igual, y que coincidiremos en el diagnóstico de que se necesita un salto adelante en el modelo de Estado.

--Sin embargo, el presidente extremeño ha sido muy crítico con las pretensiones de los Gobiernos nacionalistas...

--En todo caso, estoy convencido de que cuando explique tranquilamente lo que queremos no habrá problemas. Además, es importante diferenciar las cuestiones de identidad de las cuestiones materiales de autogobierno. En el primer caso, cada Comunidad debe denominarse como se sienta cómoda. En cuanto al segundo, y en el caso catalán, se quiere reformar el Estatuto porque hoy es insuficiente para dar respuesta a nuevos problemas.

--¿Cree que también habrá acuerdo si se plantea una reforma que toque la Constitución?

--Las reformas del Estatuto y la Constitución son cuestiones paralelas. Reformar el Estatuto no es una vía para reformar la Constitución, porque trabajamos en una reforma estatutaria en el marco de la Constitución. Simultáneamente, o después, habrá que plantear una reforma constitucional, que ha de asegurar un cambio en el Senado, que hoy no sirve para nada, para que sea un espacio de colaboración entre el Gobierno central y las Comunidades Autónomas, y que sea donde se decidan los grandes temas autonómicos.

--¿Y cuál sería el modelo de participación en foros como la UE?

--El tema a resolver es que hasta ahora, la voz de España en la UE era simplemente la del gobierno central, y creo que la voz que debe llevarse tiene que ser la del consenso entre el Gobierno y las comunidades autónomas, especialmente, en temas en que las comunidades tienen competencias exclusivas. Esta es una cuestión en la que se ha avanzado más en un año que en 20, aunque aún es insuficiente.

--¿Qué visión cree que se tiene en Extremadura de Cataluña?

--Creo que en los últimos diez años se ha producido un cambio respecto a Cataluña. Antes era vista como una región avanzada, bien vista. Sin embargo, las exageraciones de Pujol en cuanto a demandas y beneficios, ha podido hacer que aparezca como insolidaria, cuando es de las regiones que aporta más dinero al conjunto del Estado. Por eso hay que explicar que la voluntad del Gobierno catalán es de relación con el resto del Estado, y de colaboración que avance hacia el Estado Federal.

--¿Y la percepción de los catalanes sobre Extremadura?

--Hasta donde yo puedo decir, la percepción es que la región avanza y se moderniza, y lanza una imagen de que se está dando valor a lo que tiene.

--¿Qué piensa de la apreciación de que algunas actuaciones o iniciativas pretenden cuestionar la solidaridad territorial?

--El debate en Cataluña es distinto, y obedece a la falta de transparencia, de no saber qué aporta cada uno, que recibe cada uno y dónde va el dinero. En otros países está resuelto, con fórmulas de aportación según riqueza media entre los que más tienen y garantía de mínimos para quien tenga menos.

--¿Qué opina de quienes les acusan de poner en peligro la unidad de España?

--El Gobierno catalán no tiene ninguna intención de irse de España. Al contrario, y prueba de ello son estas rondas de conversaciones que estoy llevando a cabo, o el propio discurso de Maragall. Otra cosa es que hay diversas formas de entender España, y creo que es fundamental reconocer la plurinacionalidad en un Estado Federal.