Marcelino Díaz, director gerente de las bodegas almendralejenses que llevan su nombre, negó ayer que su empresa esté cometiendo "fraude moral" con la comercialización de su cava Puerta Palma , presuntamente relacionado con la venta de cava elaborado en Cataluña y comercializado como producto extremeño. Según manifestó a través de un comunicado, estas acusaciones obedecen a "intereses comerciales".

Fueron fuentes del propio sector quienes reconocieron que esa práctica no es ilegal, pero sí la calificaron como "fraude moral" para los clientes y consumidores.

Marcelino Díaz explica que "con la cosecha del 2005, ante la imposibilidad de elaborarlo en nuestras nuevas instalaciones, por no estar finalizadas, hubo que solicitar la colaboración de otra bodega para realizar el embotellado, la crianza y la manipulación previa a su salida al mercado". Por tanto, en el comunicado remitido a este medio, el empresario reconoce que su cava está elaborado por otra bodega. Además, como registra en las etiquetas de sus botellas, la empresa que le transforma el cava está instalada en la provincia de Barcelona.

También señala que su producto se adapta "a la más estricta legalidad" y que en febrero de este año solicitó la inscripción de su bodega en el Consejo Regulador del Cava. "En aquel momento", explica, era la tercera de Almendralejo que iniciaba los trámites. Sin embargo, según la última actualización de la lista de empresas elaboradoras de cava que ha publicado este organismo, las únicas bodegas extremeñas que forman parte de él son Inviosa, Vía de la Plata --en ambos casos elaboran ya su propio producto-- y Romale --que comenzará a hacerlo el próximo año--.