La retirada de Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que dejará la Presidencia de la Junta de Extremadura en 2007 después de 25 años que le hacen merecedor del título de decano de los presidentes autonómicos, completa un ciclo de abandono de otros históricos, como Jordi Pujol, José Bono o Manuel Fraga. Rodríguez Ibarra, junto con los ex presidentes de Cataluña Jordi Pujol y de Castilla-La Mancha José Bono son los tres únicos políticos que han estado al frente de sus respectivas comunidades desde que se celebraron las primeras elecciones autonómicas hasta su retirada. Dos años menos que Ibarra estuvo Jordi Pujol presidiendo la Generalitat de Cataluña, antes de ceder en 2003 el número uno de las listas de CiU a Artur Mas. José Bono permaneció 21 años al frente de la Junta de Castilla-La Mancha, que abandonó sin concluir la legislatura autonómica cuando fue nombrado ministro de Defensa por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. El veterano político Manuel Fraga presidió la Xunta de Galicia durante 15 años, desde 1990 hasta el año 2005, fecha en la que no consiguió la reelección y fue sustituido por el socialista Emilio Pérez Touriño. El único histórico que aún permanece al frente de una comunidad autónoma es Manuel Chaves, que lleva presidiendo 16 años la Junta de Andalucía, y que todavía no ha manifestado si volverá a encabezar la candidatura socialista a las elecciones autonómicas, previstas para marzo de 2008. A mucha distancia de estos dirigentes históricos se sitúan otros presidentes autonómicos que permanecen en el cargo, como Ramón Luis Valcárcel o Pedro Sanz, quienes llevan dirigiendo Murcia y La Rioja desde 1995, o Miguel Sanz, al frente de la Comunidad Foral de Navarra desde 1996.