Los ayuntamientos extremeños ya han puesto en marcha algunas iniciativas para tratar de compensar la caída de ingresos. Entre ellas está la posibilidad de grabar, mediante una tasa, el uso del espacio radioeléctrico por parte de las compañías de telefonía móvil. Según los cálculos de la Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex), esto podría reportar a los ayuntamientos de la región cerca de 3,6 millones de euros. Realmente esta medida no es nueva, pero es la ordenanza que regulaba este impuesto fue anulada por el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura al considerar erróneos algunos cálculos y parte de la redacción del texto que utilizaron 105 municipios para cobrar esta tasa.

Por otra parte han surgido otras iniciativas. Es el caso del Ayuntamiento de Mérida, que a partir del próximo año cobrará a bancos y cajas de ahorros por el funcionamiento de los cajeros automáticos que estén situados en las fachadas o en las calles de la ciudad. El Gobierno local estima que esta nueva cuota, regulada en una ordenanza específica, reportará unos 15.000 euros anuales. Esta medida ya ha sido utilizada por consistorios como el de Castuera o el de Villanueva del Fresno, entre otros.