Con el Tratado de Lisboa, ya nada será igual. Su entrada en vigor el próximo 1 de enero del 2010 supondrá para los ciudadanos extremeños, y para todos los europeos en general, un salto en las relaciones con la Unión Europea. A partir de entonces las leyes de la UE que afectan a las regiones --como la normativa referente al cultivo del tabaco en el caso de Extremadura-- podrán ser consultadas en los parlamentos autonómicos con el fin de que se tengan en cuenta las particularidades de los territorios, y aunque no será de manera vinculante, las asambleas podrán opinar y hablar de sus propias experiencias.

El nuevo perfil que se dibuja en Europa "será un antes y un después" tal y como lo definió el presidente del Parlamento regional, Juan Ramón Ferreira, tras la reunión de la Comisión Permanente de la Conferencia de Presidentes de Parlamentos Autonómicos (Coprepa), que tuvo lugar el viernes pasado en Mérida.

La delegación, que preside el representante extremeño durante este año, está integrada por la presidenta de la Asamblea de Madrid, Elvira Rodríguez, el presidente de la Asamblea de Murcia, Francisco Celdrán; y el presidente del Parlamento de Canarias, Antonio Castro. Una vez terminado el encuentro, Ferreira definió la cita como "fructífera" dada la gran cantidad de asuntos acordados para la próxima asamblea de la Coprepa en Mérida en mayo.

Por su parte, la presidenta de la Asamblea de Madrid, también destacó "el importante papel que el Tratado de Lisboa da a los parlamentos regionales" y resaltó el sistema telemático entre parlamentos que se pondrá en marcha para el intercambio de "problemas comunes y sus posibles soluciones".

En su turno, el presidente murciano se refirió, en sus declaraciones a EL PERIODICO, al principio de la subsidiariedad. "Por primera vez, desde que existe la UE, los parlamentos autonómicos vamos a tener la oportunidad de opinar en las iniciativas legislativas de las leyes de Europa, de manera modesta y no vinculante, pero es un hito y el sentido de la Coprepa", dijo.

Finalmente Antonio Castro, como impulsor de la propuesta de la plataforma de información, defendió la globalización de la información "entre la instituciones para aumentar el contacto y la relación permanente y activa entre parlamentos". Así, cualquier diputado accederá a la información de los asuntos del resto de asambleas regionales para trabajar con mayor facilidad.