Podemos quiere que el presidente de la Junta de Extremadura, así como los diputados de la Asamblea, tengan establecido un sueldo que represente 3 veces el salario mínimo interprofesional, es decir, 1.945 euros al mes por 14 pagas. Fue la primera exigencia puesta encima de la mesa ayer por el secretario general de la formación, Alvaro Jaén, en la negociación abierta con el PSOE para concretar su postura cara a la investidura de Guillermo Fernández Vara, así como la hipotética sintonía o relación entre ambos partidos para el resto de la legislatura. La petición de Jaén no fue casual, la reiteró en dos ocasiones más a lo largo de la reunión e incluso una tercera en sus primeras declaraciones a los medios de comunicación que le esperaban a la salida, lo mismo que la disminución de cargos de libre designación "que deben quedar reducidos a la mínima expresión".

Vara dijo no tener inconveniente en abordar el tema de su sueldo: "Eso para mí no es un problema, yo no quiero ser el presidente que más gane, aunque tampoco el que menos", sostuvo, aunque añadió que un presidente debe tener una retribución digna. Sobre la nómina de los diputados expresó que se tendrá que afrontar en la Mesa de la Asamblea aunque él es partidario de establecer cuantías en función de las responsabilidades asignadas, que no es lo mismo un diputado que un portavoz o un presidente de grupo, entre otros. Finalmente, acerca de los cargos de libre designación propuso analizar cómo está la situación en el conjunto del país y establecer una proporcionalidad a las características territoriales y poblacionales de Extremadura.

La cita se desarrolló por espacio de 50 minutos en la sede de la Asamblea extremeña y la misma se hizo pública después en el canal de 'Youtube' del PSOE en pro de la transparencia que quieren desarrollar los socialistas desde ahora. Guillermo Fernández Vara expresó que no le obsesiona un acuerdo cara a su investidura "puesto que no existe una alternativa de gobierno a la planteada por el Partido Socialista" (goza de 30 diputados), pero sí encontrar sintonía con determinadas formaciones de manera que se puedan impulsar políticas que aborden los problemas de la gente. En este sentido, incidió en su intención de entrevistarse con Podemos (6 diputados) ayer y también el miércoles de la semana que viene, y con Ciudadanos (1 diputado) hoy miércoles, pero no así con el PP (28 diputados) "porque ellos ya han expresado su postura cara a la investidura y ya habrá tiempo de hablar más adelante de proyectos de futuro de los problemas de la región". En este sentido, el presidente extremeño en funciones, José Antonio Monago, se quejó de que el ganador de las elecciones del 24M no le hubiera llamado como a Podemos o Ciudadanos para dialogar y avisó: "No haría mal en reunirse con quien ha sacado 28 diputados", en alusión al PP, pues, añadió: "Hay una diferencia entre gobernar para todos o para una mayoría".

Podemos entiende que el PSOE tiene "un problema de credibilidad agudo", que es una cosa cuando está en la oposición y otra cuando alcanza el gobierno, y según Alvaro Jaén, aunque exista coincidencia en el diagnóstico, "pasar de las palabras a los hechos está por ver", sobre todo si los primeros gestos que habría que desarrollar como el de la reducción de los sueldos no se lleva a término. El ve "muy complicado" un acuerdo de legislatura, pero considera que el PSOE "todavía tiene una última oportunidad de ser creíble" y de ahí la reunión de la semana que viene, la cual será en plena calle, en La Corrala de Mérida, justo donde 12 familias en paro, unas 40 personas, ocuparon 12 viviendas propiedad del 'Banco Malo' a comienzos del mes de mayo.

El PSOE, por su parte, se considera libre de ataduras, entiende que ha aprendido la lección tras la derrota de 2011 y que vuelve a la escena política con las 60 medidas de gobierno que pretenden impulsar en seis meses. Vara dijo ayer a Podemos que los socialistas "son independientes o, como mínimo, tan independientes como vosotros" y que su propuesta es de trabajar conjuntamente en pro de la gente, de la educación y la sanidad pública, la salvaguardia de los servicios sociales, la lucha contra la desigualdad y la erradicación de la pobreza.