En la región se producen actualmente más de 1.300 separaciones matrimoniales al año, lo que supone un aumento del 12% en sólo tres años. Las estadísticas muestran que cada vez se trata de una situación más habitual en la sociedad extremeña, a pesar de lo cual la comunidad autónoma sigue siendo la que menos casos presenta de todo el país tanto de separaciones como de divorcios.
Extremadura alcanza ya un volumen de más de 1.300 rupturas anuales, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), cuando en 1996 eran sólo 960 y en 1999 casi 1.160. Los cambios sociales y el mayor número de uniones civiles, unido a los menores índices de natalidad, han posibilitado que esta cifra aumente año a año.
Además, tal y como reflejan las encuestas del INE, incluso las parejas que llevan más de veinte años unidas continúan separándose. De esta forma, aunque la mayoría de las uniones se rompe entre los seis y los diez años de convivencia (23%), hay un elevado porcentaje (22%) que lo hace tras más de veinte años, aunque en estos casos en raras ocasiones se llega al divorcio. Las parejas que llevan menos de dos años casadas son las más estables.
TRAMITES LEGALES
Ante este importante aumento de las separaciones y divorcios la nueva ley de enjuiciamiento civil ha actuado precisamente en este ámbito, intentando agilizar en lo posible este tipo de procesos. En estos momentos, según han confirmado los abogados especializados en estos casos, la tramitación se ha reducido a un periodo máximo de entre tres y seis meses, cuando antes solía superar el año. Estos plazos pueden reducirse aún más si se trata de una separación amistosa, un supuesto en el que el tiempo de resolución oscila entre los 20 días y un mes.
Por lo que se refiere al coste económico --por la minuta de los abogados-- varía en cada ocasión, aunque los colegios provinciales de abogados dan a sus letrados unos precios orientativos que rondan los 1.500 euros.
