La alianza virtual de Caja Extremadura con Cajamurcia y Cajastur se va cerrando con paso firme y ayer se confirmó que a estas tres entidades se suman Sa Nostra (única Caja del archipiélago balear) Caja Cantabria y Caja Granada. De afianzarse esta unión de las seis, sería la tercera mayor caja del país, con unos activos financieros que rondarían los 150.000 millones de euros, con entre 6.000 y 8.000 millones de fondos propios y unas 3.000 sucursales. Todas ellas buscan integrarse en un Sistema Institucional de Protección (SIP). El presidente de Caja Cantabria, Enrique Ambrosio Orizaola, confirmó ayer que negocian la integración en un grupo formado por todas estas cajas, aunque "no hay nada firmado", y se podrían sumar más entidades.
Además, Caja Granada admitió ayer conversaciones con todas estas entidades para trabajar en una posible integración, pero "siempre manteniendo como límites la identidad de la caja, su naturaleza social y marca y su inequívoca vocación andaluza", según recoge Europa Press. Esta fusión podría cerrarse en los próximos meses.
Este periódico informó el pasado 1 de abril de que si esta unidad se produce, el grupo resultante sería la tercera mayor caja del país, y Caja de Extremadura mantendría su marca, órganos de gobierno y sede dentro de la comunidad autónoma.
MENOS BENEFICIOS Lo cierto es que estas seis entidades financieras han perdido volumen de negocio en el último año debido a la crisis y también han obtenidos menos beneficios netos. Analizando las cuentas de resultados de cada una de ellas el pasado año se pone de manifiesto que Caja Extremadura perdió un 24% de beneficios sobre el año 2008, obteniendo 41,5 millones de euros, con unos depósitos de clientes de 6.600 millones. Sin embargo, su nivel de solvencia está por encima de la media española (13,58% y 11,7%, respectivamente).
Además de la entidad extremeña, las demás integrantes de esta negociación obtuvieron el pasado año los resultados que se detallan a continuación. Cantabria obtuvo algo más de 45 millones de beneficios netos, con un volumen de negocio de 18.170 millones de euros (2,6% menos que en el 2008), concedió créditos por valor de 8.085 millones y los depósitos de clientes aumentaron un 5%.
De todas las que negocian esta fusión, Cajastur, la Caja de Asturias, es la que más beneficios obtuvo el pasado año (165,7 millones de euros), con un volumen de negocio de 23.013 millones (un 1,05% menos que en el 2008), unos depósitos de clientes valorados en 12.223 millones y otorgó préstamos por 2.552.
Esta entidad asturiana sería junto a Cajamurcia la que estuviera liderando la creación del SIP. La institución murciana obtuvo 134,5 millones de euros de beneficios (un 28% menos en un año), y su volumen de negocio fue de 22.140 millones, concediendo préstamos por 5.400.
Por lo que respecta a la única caja de Baleares, Sa Nostra, ganó el pasado año algo más de 22 millones de euros y su volumen de negocio se situó en 14.114 millones, con una cuenta de resultados de 191 millones (un 10% menos que en el 2008).
También cayó de forma notable, un 29%) el beneficio neto de Caja Granada, que fue de 33 millones, con un volumen de negocio de 23.835 millones, y un depósito de clientes de 12.755 millones de euros.
