Una multitud de vecinos de San Vicente de Alcántara acudieron ayer a dar el último adiós a Mari Carmen Morera, la mujer de 34 años que murió degollada la madrugada del pasado día 23, en su casa mientras dormían sus dos hijas de 7 y 12 años. Por este hecho, la Guardia Civil ha detenido como presunto homicida al marido, Jorge A. D. C., de la misma edad, pintor de profesión y natural de la cercana Valencia de Alcántara, que ayer permanecía detenido en las dependencias de este cuerpo en Badajoz, para ponerlo hoy a disposición del juzgado.

Mari Carmen es la primera mujer que muere a manos de su marido en Extremadura en los últimos tres años, según los datos oficiales que manejan las administraciones. Antes del 2000, este tipo de crímenes no se computaban específicamente como violencia doméstica.

Prácticamente todo San Vicente se volcó con la familia, víctima de una tragedia que ha sumido al pueblo en el desconcierto, y que ayer expresó su dolor con un silencio que sólo se rompió por las gritos y llantos de la madre de la joven cuando un grupo de hombres transportaba su féretro.

El funeral se ofició a las 13.15 horas en una iglesia parroquial abarrotada de gente y que se quedó pequeña para acoger a todos los asistentes, muchos de los cuales se tuvieron que quedar fuera. También asistieron el alcalde y miembros de la corporación, además de familiares y amigos.

La muerte de esta joven madre sanvicenteña constituyó un misterio desde el principio, cuando los médicos se llevaron a su marido, hallado abrazado o cogido al cuerpo de su esposa, para que no se hiciese daño, y dejaban atrás un escenario teñido de sangre.

La mujer presentaba una puñalada en el cuello. Ayer, algunos vecinos comentaban que los médicos se encontraron la casa llena de sangre cuando llegaron, que no encontraron el arma y que había indicios de que el marido intentó taponar la herida del cuello. Sobre estos datos, no hay confirmación oficial ni del Juzgado de Instrucción número 2, que lleva el caso, ni de la Delegación del Gobierno, como tampoco sobre si el detenido se ha declarado culpable, como manifestaban algunos vecinos en San Vicente.