Juan Manuel Vázquez Ferrera es uno de los primeros ochenta oliventinos que han adquirido la doble nacionalidad. Según explicó ayer, ha dado el paso por tres motivos: porque no le obligan a renunciar a la nacionalidad española, él dice que se siente español igual que ahora portugués; por sus antepasados, dado que hace sólo 5 generaciones todos los oliventinos eran portugueses y de la noche a la mañana cambiaron de país y de rey; y por sus hijos, pues considera que es un legado que les deja a sus descendientes en un mundo globalizado donde no deben cerrarse puertas puesto que tener dos nacionalidades multiplica las posibilidades de la persona en las facetas educativa, laboral y de otra índole.

Para este vecino, "Olivenza vive un momento histórico". A su juicio "el pasado fue el que fue, pero el futuro lo hacemos nosotros y eso pasa por el reconocimiento de nuestras raíces y la apuesta por la biculturalidad de nuestro pueblo".

En 'Além Guadiana' son conscientes de que ahora viene un amplio trabajo de asesoramiento, puesto que van a ser muchos los vecinos del municipio que den el paso. Sin embargo, están más que satisfechos con el logro alcanzado: "nos reconcilia con nuestra historia, no hay parangón de ningún municipio así en Europa y se agranda con creces la peculiaridad e imagen de Olivenza como punto de encuentro de dos culturas".