El campo extremeño ha perdido ya 193 millones de euros a causa de la sequía que padece la región --y buena parte del país-- desde hace meses y que es ya la más grave de los últimos 70 años. En este sentido, un informe elaborado por la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) afirma que en toda España las pérdidas alcanzan los 700 millones de euros, una cifra que podría "dispararse" si no llueve antes de finales de este mes. Del total de pérdidas, 373 millones corresponden al sector agrícola y 285 al ganadero.

En el caso extremeño, la mayor parte de las pérdidas se han producido en el sector ganadero, con 150 millones --hay que tener en cuenta que esta cantidad incluye el perjuicio causado por la lengua azul --. Los 43 millones restantes corresponden a la agricultura de la comunidad.

Según UPA, la sequía ha dañado el sistema productivo de "forma irreparable" en el sector ganadero, es decir, no ha existido un aprovechamiento de los pastos y, dada la ausencia de esa primera floración de pastos y aunque llueva mucho en primavera, el desarrollo de los pastizales no será igual de productivo que en años anteriores.

EL FUTURO "La evolución de las zonas de sequía y su nivel de afección dependerá tanto del nivel de precipitaciones como de las temperaturas medias y máximas de los próximos días", señaló la organización agraria, que destacó que el pasado otoño-invierno puede considerarse como uno de los periodos más secos en España de los últimos 15 años.

La zona más afectada es Andalucía, que con unas pérdidas valoradas en 288 millones de euros es la única que está sufriendo más problemas que Extremadura, informa Europa Press.

Por su parte, el director general del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Angel Luis Alvarez, admitió ayer la "situación excepcional" que vive el campo a consecuencia de la sequía, y no descartó que el Gobierno añada "medidas complementarias" al sistema de seguros agrarios, aunque indicó que "aún es pronto" para evaluar el alcance real de la falta de agua.

Alvarez, que participó en Bilbao en una jornada organizada por el Foro Rural Mundial e Intermón Oxfam para analizar las negociaciones agrícolas de la OMC, reconoció que el agro español "está viviendo un año muy malo" a causa de las heladas y la sequía.

A su juicio, la climatología extrema está produciendo daños en los pastos del sur y el este de España, y amenaza a muchas zonas de cultivo "e incluso algunas de regadío". No obstante, Alvarez resaltó que "aún es pronto" para conocer el impacto de esta problemática.

Sin embargo, el director general del ministerio destacó que el Estado cuenta con un sistema de seguros agrarios "que permiten atender una buena parte de estos daños".