El mercado de la vivienda libre en la región continuó con su tendencia al alza durante el tercer trimestre de este año pero sigue moviéndose en niveles muy alejados de los previos a la crisis. El valor de las transacciones inmobiliarias que tuvieron lugar entre julio y septiembre pasados en la comunidad autónoma fue de 115,6 millones de euros, un 9,3% más que en el mismo periodo del 2016, lo que llevó a cerrar por tercer trimestre consecutivo con un crecimiento interanual positivo, de acuerdo a las estadísticas publicadas por el Ministerio de Fomento.

En el acumulado del año, la cuantía total de las operaciones se situó en 387,9 millones de euros, un 11,5% más que en los mismos tres trimestres del ejercicio anterior. Lo positivo es que se trata del mejor dato contabilizado para este intervalo del año desde el 2012. Lo negativo, que el crecimiento queda aún muy lejos del experimentado a nivel nacional, que es del 23%, hasta casi los 54.000 millones de euros. También se está a mucha distancia aún de los niveles precrisis. Un ejemplo: en los nueve primeros meses del 2007, las transacciones formalizadas supusieron más de 1.089 millones de euros, cerca del triple que en el actual ejercicio.

«En el año 2014 tocamos suelo, así que cualquier levísimo repunte que haya, que es lo que se está produciendo ahora, se nota, pero eso no significa que el mercado vuelva ni muchísimo menos a la alegría que hubo entre 2000 y 2007», sostiene Francisco Marroquín, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Cáceres. «Venimos de cifras tan bajísimas, que un par de promociones que se entreguen, algunas adjudicaciones bancarias o un poco más de demanda que haya, que la está habiendo, lo percibes, pero el mercado sigue bastante parado».

El segmento de la vivienda de segunda mano continuó copando el grueso de las operaciones inmobiliarias contabilizadas en Extremadura, con 367,6 millones de euros, un 94,8% del total, por apenas 20,2 millones en transacciones realizadas con viviendas nuevas. «La situación va a seguir así durante muchísimo tiempo. En primer lugar, porque hay más oferta [de vivienda usada]. En segundo, porque hay más facilidades hipotecarias para la segunda mano que no para la nueva promoción. Y en tercer lugar, lo más importante, porque no hay grandes expectativas de nuevas promociones, como polígonos nuevos en desarrollo».

En cuanto al valor medio de las transacciones, en el tercer trimestres se situó en Extremadura en 73.740,2 euros, algo menos de los 76.972,6 euros del trimestre anterior. A mediados del 2011, este indicador llegó a rozar los 131.000 euros. En este punto, resalta Marroquín, «las transacciones hay que verlas en euros por metro cuadrado» —un detalle al que no entran las estadísticas de Fomento—, si bien apunta que, en materia de precios, «el mercado se está reajustando y tenderá a un alza de forma constante, pero liviana, en los próximos meses». «Después de haber caído una monstruosidad, ahora los precios empiezan a repuntar», esgrime. No obstante, como freno a este alza, añade, actúa el hecho de que se estén vendiendo «muchas viviendas» construidas como VPO, que ahora salen al mercado como libres pero que «siguen teniendo un precio regulado».

A juicio de este experto, el estoc de viviendas en Cáceres «sigue siendo bastante elevado. Desde el colegio estimamos que tenemos un estocaje suficiente para una rotación de ocho años». Es decir, si no se construyera ni saliera a la venta ninguna vivienda más, «habría todavía un paquete de oferta suficiente para cubrir la demanda» durante ese periodo. «Todo lo que pase de tres o cuatro años empieza a ser elevado. Hay muchísima vivienda disponible todavía», apostilla.

En este sentido, destaca que la vivienda sigue sin recuperar su carácter de activo de inversión. «En locales y en naves industriales sí que está apareciendo más la figura del inversor, pero en viviendas solo se hacen operaciones puntuales».