La financiación del regadío en Tierra de Barros, la incertidumbre ante la nueva Política Agraria Común (PAC), el futuro de la fruta de hueso o las restricciones a la producción de cava son algunos de los asuntos que el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, trasladó al nuevo ministro del ramo, Luis Planas.
En este primer encuentro, Fernández Vara reclamó el apoyo del Gobierno central en asuntos de vital importancia para el sector primario extremeño y su industria asociada, informó el Ejecutivo regional en un comunicado. Fernández Vara agradeció la voluntad de diálogo de Planas, en una reunión en la que Extremadura expuso preocupaciones como la posición del ministerio ante el proyecto de regadío en la comarca de Tierra de Barros.
El Ejecutivo extremeño ya ha reclamado la declaración de interés general de la zona regable, que afecta a 15.000 hectáreas, así como la colaboración ministerial en la financiación del mismo. En ese sentido, el presidente de la Junta mantiene la idea de que es preciso la optimización de los recursos públicos y trabajar de forma conjunta en temas como los que afectan a las infraestructuras.
También hablaron de las negociaciones para la reforma de la PAC. La Junta de Extremadura se muestra contraria a que se reduzca el presupuesto de esta política comunitaria y viene defendiendo la necesidad de que tenga entre sus principales ejes la lucha contra el cambio climático, el freno a la despoblación, el visibilizar el papel de la mujer rural y el potenciar el desarrollo del medio rural.
Fernández Vara informó también del recurso interpuesto por Extremadura contra la resolución del Ministerio de Agricultura de limitar la ampliación de hectáreas de viñedo dedicadas al cava, una medida que ha afectado al potencial crecimiento del sector en Extremadura.
PROBLEMAS LIGADOS AL VIÑEDO / Dentro de los problemas ligados al viñedo, se puso sobre la mesa el problema generado con el reparto que desde 2012 se viene haciendo de los fondos para la reestructuración de este cultivo.
Además, Fernández Vara aprovechó la reunión para abordar la preocupación sobre el litigio abierto por las sanciones vinculadas a la definición del concepto de pastos permanentes.
Por último, el jefe del Ejecutivo extremeño analizó la situación del sector de la fruta de hueso en España, donde Extremadura es una de las principales zonas productoras.
Destacó la importancia socioeconómica de este sector en la región, cuyo futuro va ligado a un Plan Estratégico de la Fruta que pretende consolidar los mil empleos estables que genera, además de seis millones de peonadas en campaña y más 25.000 hectáreas plantadas con frutales.
