"Yo no hago más inversiones, se acabó, aguanto hasta que pueda, pero en cuanto deje de estar atado por la cuota, lo dejo". Antonio Villafaina comenzó a gestionar con 35 años una explotación de vacuno de leche en la localidad pacense de Valdelacalzada, uno de los núcleos que tradicionalmente han concentrado esta actividad en la región. "Entonces se cobraba más por la leche y los gastos eran menos", dice. Ahora, con 50, asegura que "esto no levanta cabeza y la cosa está cada vez peor".

La suya es una explotación mixta. Algo más de la mitad de sus seis hectáreas de superficie están dedicadas a los frutales (ciruelos) y el resto a las naves de ganado. Cuenta con 111 vacas, de las que son ordeñables unas 70. Su cupo anual de leche es de 400.000 kilos. "Si te pasas te penalizan y si no llegas puedes perder parte del cupo", se queja. Su producción se la vende a la cooperativa Caval, de la que es socio. De allí, "unas veces se vende a Puleva, otras a Danone..."

Ganado para mejorar la genética de sus reses, inseminaciones, piensos, naves, compra de cuotas..., Villafaina enumera la larga lista de costes que debe afrontar para mantener su explotación. "Desde que comenzamos hemos ido haciendo inversiones y te vas entallando. Este año he acabado de pagar unas naves, y aún estoy pagando la compra de cupo", subraya este ganadero que recuerda como los agobios financieros le han impedido adquirir este año un tractor nuevo. "Ya tenía aprobada la ayuda de la Junta para comprarlo", lamenta.

A los problemas económicos se añaden las grandes exigencias personales que conllevan estas explotaciones. "Aquí no puedes caer ni malo. Mi mujer y yo hemos tenido que venir a trabajar muchas veces con 40 de fiebre. No es como en otras labores, que puedes decir: ´hoy no voy´. Y si tengo que pagar a alguien, no me queda para mí".

Antonio esta casado y tiene tres hijos. Ninguno de ellos continuará con la explotación. "Cómo van a estar aquí, si esto es lo último que hay. Están locos por que se venda. A la vuelta de cuatro o cinco años en este pueblo no queda nadie en esta actividad. Esto terminará muriendo".