Si la familia no vuelve a cambiar de opinión, Michael Jackson recibirá finalmente sepultura el próximo jueves, tras una ceremonia cerrada al público, en el exclusivo cementerio privado de Forest Lawn de Glendale, en Los Angeles, donde están enterrados numerosos ilustres famosos como Clark Gable y Humphrey Bogart. Si es así, la tumba no podrá ser un lugar de peregrinación para los fans del cantante, ya que al lugar solo pueden acceder las familias y los invitados. Sin embargo, los seguidores de Jackson pueden optar por seguir sus pasos gracias a algunos espabilados que ya han empezado a explotar el filón de su muerte.

Así, Denise Jordan y Tecora Rogers han montado un tour turístico llamado La vuelta a los orígenes del rey del pop , que recoge a los fans en autobús en Chicago y los lleva a Gary (Indiana), ciudad natal del autor de Bad , pero un lugar sin ningún encanto.

El recorrido empieza en la fábrica donde trabajaba el patriarca de la familia, Joseph, e incluye paradas ante la clínica donde nacieron los nueve hermanos Jackson y en la escuela Roosevelt, a la que fue el pequeño Michael y donde, según la leyenda, el padre advirtió su potencial artístico cuando, con 5 años, cantó en una fiesta. Pero el punto culminante del tour es el 2.300 de la calle de Jackson, donde está la casa donde la familia vivió antes de que el triunfo de los Jackson Five les permitiera mudarse a una mansión.

Otras estrellas convertidas en mito tras su prematuro fallecimiento también tienen lugares de peregrinación. Graceland, la casa de Menfis (EEUU) donde Elvis Presley residió desde los 22 años y donde yace sepultado, es hoy lugar de visita obligada para sus fans y una atracción rentable para la ciudad. Hacia el 16 de agosto, aniversario de su muerte hace 32 años, los autobuses turísticos llenan la localidad, en la que cada año miles de personas guardan un minuto de silencio por el rey del rock.

En Nueva York, fans de John Lennon se reúnen en la fecha de su asesinato en Central Park o ante el cercano edificio Dakota, donde vivía y en cuya entrada fue abatido a tiros. También la casa y el mausoleo de Bob Marley, en Jamaica, son paradas de los viajes organizados.

LUGARES MUY VISITADOS En el puente del Alma, en París, el lugar donde murió en accidente de coche la princesa Diana, a los 36 años, "aún hay muchos turistas que vienen a dejar flores", explica Brame, de la oficina de turismo de la capital francesa. La tumba de Jim Morrison, el líder de The Doors que murió de sobredosis en 1971, situada en el cementerio Père Lachaise de París, es el lugar más visitado de la ciudad, tras la Torre Eiffel, Notre Dame y el centro Pompidou.