La reina Sofía visitó ayer uno de los barrios más pobres de Santo Domingo, en donde viven en la más absoluta miseria unas 120.000 personas que hace menos de dos años tuvieron que refugiarse en los tejados de sus casas para salvarse de las inundaciones que provocó la tormenta tropical Noel. A la Reina, que tiene ya ocho nietos, le encantan los niños y durante su visita a Santo Domingo no dudó en coger en sus brazos a dos bebés (en la fotografía).