El hombre está despatarrado en uno de los sillones y la mujer de pie tras el otro. "Con la cuota que permite la cartilla de racionamiento nadie puede vivir", afirma el hombre. La cuota permite, por ejemplo, estas cantidades mensuales: 460 gramos de pescado y de pollo, 8 huevos y 230 gramos de aceite. El hombre y la mujer son peluqueros privados que deben cobrar el precio oficial: un peso, la 26 parte de un dólar en la cotización legal.

Penúltima semana del mes de mayo. Los cubanos esperan, con aprehensión pero resignados, que se aclaren dos incógnitas. ¿Cuánto aumentarán los precios al reabrirse las TRD (tiendas estatales recaudadoras de divisas)? ¿Se pondrán en práctica el 1 de junio las draconianas medidas sugeridas a George Bush para acelerar la caída del régimen cubano?

En respuesta, el presidente cubano, Fidel Castro, organizó una marcha el pasado 14 de mayo. Según cifras oficiales, participaron 1.200.000 personas. En su alocución, Castro se comprometió a morir en primera línea, defendiendo a su patria, si se produce una invasión de EEUU. El discurso de Castro reflejó la convicción de los dirigentes cubanos de que el "imperialismo yanqui" tiene en cartera un golpe aéreo como preludio a su intención de invadir Cuba. "Creemos que las medidas (sugeridas a Bush) tienen la finalidad de propiciar una crisis migratoria que sería considerada una amenaza para la seguridad nacional de EEUU", dice el ministro de Relaciones Exteriores cubano, Felipe Pérez Roque.

Una de las medidas sugeridas a Bush por la comisión designada por él es permitir, sólo una vez cada año y medio, las visitas a la isla de los cubanos residentes en EEUU, y sólo para visitar a padres, abuelos e hijos (hasta ahora, era una vez al año, para visitar a cualquier familiar).

Desde 1978, los emigrados, excepto los involucrados en actividades hostiles, pueden visitar a sus parientes en la isla.

Las visitas a la isla

En el año 2003, lo hicieron 167.710, y si se estima que cada uno trae consigo 500 dólares, lo que supone unos ingresos de casi 84 millones de dólares (68 millones de euros o más de 11.000 millones de pesetas). La red de TRD aporta otros 800 millones de dólares anuales, según la Comisión Económica para América Latina (CEPAL). A ello hay que sumar las remesas anuales "legales" enviadas por los emigrados mediante la compañía estadounidense Western Union.

Si se añaden las cantidades que los emigrados hacen llegar ilegalmente, la suma iguala o sobrepasa lo ingresado por la economía cubana con las principales exportaciones.

Cuba llama bloqueo a lo que EEUU llama embargo. En realidad es un boicot comercial y financiero, sostenido desde 1962. Pero también hay un boicot al bienestar hogareño ejercido por la burocracia cubana, y por chapuceros que se sienten seguros en sus empleos.