El rehén alemán Rudolf Blechschmidt, en manos de los talibanes desde el 18 de julio, pidió ayuda a los gobiernos alemán y afgano en un vídeo difundido ayer por Tolo TV, una cadena de televisión privada de Afganistán.

"Estoy prisionero, estoy en muy mal estado de salud", afirma el ingeniero alemán en el vídeo, de menos de dos minutos, en el que aparece tosiendo y medio recostado. Blechschmidt subraya que los medicamentos que toma para tratar una dolencia cardiaca se le acabaron hace tres días.

En un inglés con acento alemán, el rehén pide al Gobierno afgano y a la embajada alemana que "hagan lo posible para que pueda ser liberado rápidamente". Blechschmidt usa un tono de desesperación y parece tener que hacer esfuerzos para hablar.

Cuatro afganos presentados como colegas del alemán secuestrados junto con este último aparecen también en el vídeo, la segunda filmación en la que aparece Blechschmidt tras una primera difundida por Al Jazira dos semanas después de su secuestro.

GABINETE DE CRISIS El Gabinete de crisis del Ministerio de Exteriores alemán señaló que está analizando la grabación. Tolo TV es una cadena privada muy popular en el país que trata de hallar una vía intermedia entre el modernismo occidental y la tradición afgana y musulmana.

Mientras, al menos tres civiles murieron ayer y otros 14 resultaron heridos en la explosión de una bomba que iba dirigida contra el jefe de la policía de Helmand.