Al menos 50 personas han muerto y cerca de 150 han resultado heridas al estallar una potente bomba en uno de los vagones del metro de Moscú, ha informado el Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso.

Una kamikaze chechena es probablemente la autora del ataque, que ha destruido al menos tres vagones y ha provocado un grave incendio que se ha propagado por el sistema de ventilación del túnel del metro.

En el convoy afectado viajaban cerca de 1.500 personas, por lo que las autoridades creen que es posible que aumente notablemente el número de víctimas.

El poder destructivo de la bomba ha sido estimado en el equivalente a entre uno y tres kilos de trilita.

En una hora punta

El atentado se ha producido a las 8.32 hora local (las 6.32 horas en España) a una hora punta, es decir, cuando numerosos ciudadanos se dirigían a su lugar de trabajo.

La bomba ha estallado en el segundo vagón de un tren que se encontraba en el túnel, a unos 300 metros de la estación Pavelétskaya y cuando se dirigía a la de Avtosabodskaya, en el sureste de Moscú.

El convoy circulaba a una velocidad de 60 kilómetros por hora, por lo que tras la explosión (provocada por entre uno y dos kilogramos de trilita) la inercia ha hecho avanzar el tren otros 300 metros desde el lugar donde se ha producido el suceso.

Un miembro del equipo encargado de investigar el atentado, citado por al agencia digital Newsru, ha dicho que "en ese espacio cerrado la potencia de la explosión se ha multiplicado, lo que podría explicar el gran número de víctimas. El vagón ha reventado, literalmente". Otros dos vagones han quedado totalmente destruidos.

Según los primeros datos, cerca de 1.500 personas viajaban en el convoy cuando se ha producido la explosión.

La pista chechena

Fuentes de la policía capitalina y del Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB) han apuntado a la posibilidad de que hayan sido uno o varios terroristas suicidas los autores de la masacre.

Según la agencia Interfax, fuentes del equipo de investigación han citado testimonios de testigos para indicar que ha podido ser una mujer kamikaze, probablemente chechena, la autora del atentado.

La suicida probablemete ha estado asistida por un cómplice, al que ahora busca la policía y cuyo rostro, de aspecto caucasiano, es posible que haya sido registrado en una grabación de las cámaras de la estación.

La pista chechena para explicar este atentado ya ha sido mencionada por la policía y los servicios secretos rusos, pues el atentado sigue el mismo patrón que otros cometidos por mujeres chechenas kamikazes en Moscú y otras zonas de Rusia.

Evacuación de más de 700 supervivientes

La evacuación de más de 700 supervivientes ha terminado apenas dos horas después de la explosión y los bomberos han sofocado el fuego.

Los equipos de rescate siguen en el lugar de la tragedia recuperando cuerpos sin vida y restos humanos, y a la búsqueda de otros posibles supervivientes.

La agencia Interfax ha citado a uno de los supervivientes del acto terrorista que se encontraba en otro vagón, que ha dicho que él y otros pasajeros han podido abandonar el convoy y avanzar unos dos kilómetros por el túnel lleno de humo hacia la estación de Avtozavodskaya.

Cuatro atentados en el metro moscovita en 70 años

Éste es el cuarto atentado perpetrado en el metro de Moscú en sus casi 70 años de existencia.

El primer atentado, ocurrido aún en tiempos soviéticos, se produjo el 8 de enero de 1977 y causó siete muertos y 44 heridos.

El 11 de junio de 1996 otra bomba mató en la estación Túlskaya a cuatro personas e hirió a 12.

El 1 de enero de 1998 un artefacto explosivo estalló en la estación Tretiakóvskaya e hirió a tres personas.

El 5 de febrero de 2001 otra bomba estalló en la estación Biuelorruskaya y causó 20 heridos.