Funcionarios del Departamento de Defensa de EEUU admitieron ayer que habían sido desplegadas baterías de misiles antiaéreos cerca de Washington para contrarrestar la amenaza de posibles ataques terroristas. Desde hace una semana, EEUU se halla en situación de alerta naranja debido a la numerosa información recibida por sus servicios de contraespionaje.

Las fuentes no quisieron precisar el lugar exacto donde habían sido colocados los misiles antiaéreos. Tan sólo recordaron que idénticas baterías habían sido desplegadas en los alrededores de la capital de EEUU durante el primer aniversario del 11-S.