Estados Unidos impondrá a partir de enero a los europeos exentos de visado la obligación de obtener una autorización electrónica previa para poder viajar al país, según anunció ayer la Administración norteamericana a la Comisión Europea. La autorización electrónica se aplicará tanto a viajes de turismo como de negocio, lo que puede constituir un visado camuflado y restringir los viajes transatlánticos, según fuentes comunitarias.

Esas autorizaciones electrónicas deberán solicitarse a través de internet como mínimo 72 horas antes de emprender el viaje y sin ellas no será posible subir a bordo de los aviones, ni de los barcos con destino a EEUU, según el plan elaborado por el secretario norteamericano de Seguridad Nacional, Michel Chertoff. Las peticiones podrán comenzar a cursarse en agosto y las autorizaciones tendrán una validez de dos años o hasta la expiración del pasaporte. Quien vea desestimada la autorización de viaje deberá pedir un visado.

El Gobierno vincula esta nueva restricción a la necesidad de evitar de que puedan llegar a EEUU terroristas procedentes de países sin obligación de visado. La Administración de George Bush teme que Europa se convierta en una plataforma para ataques terroristas contra EEUU.

La medida se aplicará a España y a los otros países europeos occidentales que estaban exentos hasta ahora de visado, así como a Japón, Australia, Singapur y Nueva Zelanda.

INFORME DETALLADO La Comisión Europea pidió al Gobierno norteamericano una información detallada y por escrito del nuevo requisito para poderlo examinar en profundidad, según explicó el portavoz del comisario de Justicia e Interior, Jacques Barrot. Tanto Barrot como su antecesor en el cargo, el actual ministro italiano de Exteriores, Franco Frattini, se han mostrado muy comprensivos y colaboradores con las exigencias de seguridad de EEUU.