España defendió ayer en la Unión Europea un enfoque más global y político de la lucha antiterrorista, que no se limite sólo a medidas de seguridad, sino que aborde los conflictos y las crisis sociales que alimentan las acciones de los grupos extremistas.

En la última jornada del consejo informal de ministros de Exteriores de la UE en el castillo de Sint Gerlach (cerca de Maastricht), el ministro español, Miguel Angel Moratinos, señaló que la política antiterrorista para ser eficaz "no puede limitarse a medidas policiales y militares", sino que debe abordar "el pretexto y el contexto" en el que se producen las acciones terroristas y que sirven de caldo de cultivo de los grupos extremistas.

Moratinos subrayó que "hay que afrontar los conflictos y las crisis abiertas", como Irak, Oriente Próximo y Chechenia, "para eliminar los asideros de legitimación de esos fanáticos". Y abogó por un enfoque más amplio de la estrategia antiterrorista, que aborde los factores políticos, sociales, económicos, culturales y religiosos.

El ministro italiano, Franco Frattini, y el ministro griego, Petros Molyviatis, defendieron los mismos planteamientos.

CONFLICTO CON RUSIA La presidencia holandesa de la UE y la mayoría de los ministros comunitarios intentaron ayer desactivar la tensión diplomática creada con Rusia por las declaraciones del responsable de la diplomacia holandesa, Bernard Bot, al preguntar el viernes por la noche a Moscú "cómo había podido ocurrir" que el secuestro concluyera con tantos muertos. Esa petición fue interpretada por Moscú como "odiosa, ultrajante y blasfematoria". Bot aseguró que sólo se trataba de conocer la versión de las autoridades rusas sobre el trágico desenlace.