Irán ha afirmado que prefiere proseguir el diálogo con la comunidad internacional para solucionar la crisis nuclear, aunque ha asegurado que no le preocupa el envío al Consejo de Seguridad de la ONU.Varios responsables iranís, incluidos el presidente del país, el ultraconservador Mahumd Ahmadineyad, han reiterado, además, que la República Islámica no renunciará, bajo ninguna condición, a sus actividades nucleares, ya que "tienen fines pacíficos".Esta postura aparece después de que Ahmadineyad ordenara suspender la aplicación del "protocolo adicional" del Tratado de No Proliferación (TNP) que permitía visitas por sorpresa de inspectores internacionales a las instalaciones nucleares iranís.Abiertos a la negociación"El camino de las negociaciones aún está abierto e Irán está dispuesto a seguir negociando y a hacer todo lo posible en este ámbito", ha dicho el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Hamid Reza Asefi, en una rueda de prensa en Teherán.También ha dicho que la cooperación entre la República Islámica y la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) "no ha llegado a un callejón sin salida" tras el envío del caso nuclear iraní al Consejo de Seguridad. En su opinión, la resolución de la AIEA en este sentido "tiene objetivos políticos" y "dañará a la otra parte más que a Irán".