BAGDAD. La recién refundada policía iraquí, entrenada ahora por EEUU, tuvo ayer su bautismo de fuego. Agentes iraquís asaltaron ayer durante 45 minutos un edificio de ´okupas´ del centro de la capital, desalojaron a sus inquilinos y arrestaron a tres personas (foto). El incidente demostró el foso de desconfianza que separa a los agentes de los ciudadanos. Los vecinos acusaron de corrupción al cuerpo policial.