El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha compartido en su cuenta de Twitter tres vídeos islamófobos publicados por la activista ultraderechista británica Jayda Fransen, con los que ha encendido por enésima vez la mecha de la polémica.

En uno de los vídeos, dos hombres musulmanes rompen una figura de la Virgen, en otro un inmigrante golpea a otro chico que lleva muletas, y en la tercera grabación un adolescente es arrojado desde una azotea por un grupo de musulmanes.

El dirigente Trump, que tiene 43,5 millones de seguidores en esta red social, ha compartido los tres vídeos antiislámicos pero sin realizar ningún tipo de comentario.

Jayda Fransen es una de las líderes del partido ultraderechista británico Britain First. La controvertida activista, que es conocida por sus ideas islamófobas, fue arrestada este verano en Belfast por un discurso en el que incitaba el odio hacia esta comunidad religiosa.

Un portavoz de la primera ministra británica, Theresa May, ha declarado que Trump ha cometido «un error» compartiendo los vídeos de la representante de Britain First, un partido que «busca dividir las comunidades usando una retórica odiosa que difunde mentiras y alimenta tensiones».

No es la primera vez que el propio presidente lanza mensajes racistas. La llegada de Trump a la Casa Blanca incluso fue recibida como una «victoria» por el supremacismo estadounidense. Por contra, cada vez son más las voces anti-Trump.