Ochenta días después del inicio de su cautiverio, el corresponsal de la BBC en Gaza, Alan Johnston, reapareció ayer en un vídeo colgado en una web donde son habituales los comunicados de Al Qaeda. El reportero escocés, de 45 años, del que no había señales de vida hasta ahora, afirma estar en "buen estado" y recibiendo "muy buen trato" de sus captores.

Con la voz más apagada de lo habitual y bajando a veces la cabeza, como si ojeara un discurso preparado, Johnston culpa en el vídeo a Israel del sufrimiento palestino y condena el "incansable esfuerzo de Gran Bretaña para ocupar las tierras musulmanas".

En el norte de la franja de Gaza, donde Johnston fue secuestrado hace casi tres meses a punta de pistola, el Ejército israelí mató ayer a dos niños palestinos de 11 y 13 años. Un portavoz militar justificó el crimen alegando que no se detuvieron ante las "repetidas" advertencias y dejaron un "artefacto sospechoso" cerca del muro fronterizo.

El vídeo de Jonhston lleva el logo del Ejército del Islam, un grupo tras el que se esconden miembros de los Dogmoush, responsables de otros secuestros de periodistas.

SIN PISTAS No hay pistas sobre cuándo se grabó el vídeo, pero al final aparece un comunicado en el que los captores piden la liberación de los presos musulmanes --incluido el clérigo cercano a Al Qaeda, Abú Qatada-- encarcelados en Gran Bretaña y otros países. Las autoridades palestinas han afirmado saber dónde se halla el periodista.