Mayoría absoluta para Nicolas Sarkozy, pero mucho menor de la anunciada por los sondeos. Esta fue la sorpresa de la segunda vuelta de las legislativas celebrada ayer en Francia. Los socialistas no solo han resistido, sino que aumentan en más de 50 el número de sus diputados. El nuevo presidente tendrá casi todos los poderes, pero los franceses no han querido que la ola azul sepulte a la izquierda.

Las proyecciones de tres institutos de sondeo otorgaban a la derecha un máximo de 357 escaños y un mínimo de 342 que, en cualquier caso, es menos de lo que ahora tenía solo la Unión por un Movimiento Popular (UMP), el partido de Sarkozy, que contaba con 359 escaños. La UMP (entre 318 y 329) no ha conseguido, pues, mejorar el resultado de Chirac en el 2002.

Los portavoces de la derecha se esforzaban anoche en destacar que tendrán mayoría en la Asamblea Nacional; algo cierto, pero las sonrisas estaban del lado de los dirigentes socialistas.

La amargura de la derecha aumentó cuando, a las 21.35 horas, se supo que Alain Juppé, el único ministro de Estado y número dos del Gobierno, había sido derrotado en Burdeos por la socialista Michèle Delaunay, que obtuvo un 50,93% de los votos. Juppé anunció que hoy presentará su dimisión como ministro.

ASCENSO SOCIALISTA La izquierda, según las mismas proyecciones, obtendría entre 218 y 232 escaños, con entre 202 y 210 para el Partido Socialista (PS), que ahora disponía de 149. Este inesperado ascenso se interpretaba por parte de diversos dirigentes socialistas como un "toque de atención" al Gobierno para que tenga presente que no podrá hacer cualquier cosa. Y el mejor ejemplo ha sido el debate producido entre las dos vueltas sobre la implantación del IVA social (aumento de cinco puntos del tipo medio para financiar el gasto social), en el que los socialistas se han unido por primera vez para oponerse a este proyecto del Gobierno de Fillon.

El Movimiento Democrático (MoDem), de François Bayrou, logró 4 o 5 de las 6 circunscripciones en las que se mantenía.

SIN GRUPO El Nuevo Centro (centristas aliados con Sarkozy) superaron al MoDem, como estaba previsto, pero no está claro que puedan formar un grupo independiente en la Asamblea. Y el Partido Comunista (PCF) se quedará sin grupo parlamentario. Los Verdes permanecerán en la Asamblea con 3 o 4 escaños.