Para Nicolas Sarkozy, la solución para desatascar el proceso de paz en Oriente Próximo pasa por la creación de un "Estado palestino viable", pero no por un reconocimiento precipitado del mismo. Después de reunirse ayer en el Elíseo con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbás, el jefe del Estado francés se distanció así de la vía defendida por su ministro de Exteriores, Bernard Kouchner, y sugerida por su primer ministro, François Fillon. Ambos apostaron por acelerar el proceso.

Sin embargo, la estrategia de los hechos consumados no fue avalada ayer por Sarkozy. "¿De qué sirve un Estado que no tenga fronteras ni pueda funcionar de forma razonable?", se interrogó. A su juicio, un Estado palestino "democrático y moderno" debe también "garantizar la seguridad de Israel".