La oposición ucraniana logró ayer su primera victoria al paralizar el Tribunal Supremo ucraniano la toma de posesión como presidente de Ucrania del candidato prorruso, Viktor Yanukovich. El Supremo acordó examinar la demanda presentada por el candidato liberal opositor, Viktor Yuschenko, que sostiene que las elecciones estaban amañadas.

Los jueces prohibieron la publicación oficial de los resultados electorales que certificaban la victoria de Yanukovich. Esta decisión hizo fracasar los planes de organizar una inauguración relámpago de Yanukovich ante el Parlamento, prevista para esta semana, según la oposición. De acuerdo con la Constitución ucraniana, un presidente no puede jurar el cargo hasta que el resultado electoral no sea publicado en los documentos oficiales.

El Supremo examinará el lunes la queja de Yuschenko de que la victoria de Yanukovich fue resultado de un fraude masivo. Este dictamen dio un nuevo impulso a las protestas callejeras en apoyo de la oposición, en las que participan cientos de miles de personas. Yuschenko calificó el fallo como un primer paso hacia la convocatoria de nuevas elecciones, tal y como exigía. A la protesta de la plaza Independencia de Kiev acudió el polaco Lech Walesa, quien auguró "posibilidades de acuerdos".