La Unión Europea (UE) se dotará de unidades militares de choque para poder actuar de inmediato en el caso de una crisis internacional, con el objetivo de asegurar la paz y la estabilidad y de reforzar su papel como potencia mundial autónoma de EEUU. Los ministros de Defensa de la UE, reunidos en Bruselas, dieron ayer un amplio respaldo a esa propuesta, impulsada por Francia, Alemania y Gran Bretaña, según anunció la presidencia irlandesa.

La UE pretende disponer en el 2007 de ocho o nueve grupos de combate, formados cada uno por 1.500 soldados y altamente equipados militarmente. Estos grupos deberán ser capaces de desplegarse en menos de 15 días lejos del territorio europeo y de autosostenerse militarmente en una zona hostil en misiones de 30 a 120 días. Estas unidades serán la punta de lanza de la fuerza de intervención, dotada con 60.000 soldados y capaz de estar un año fuera.

"La UE debe estar preparada para actuar rápidamente, es un elemento central de nuestros esfuerzos para hacer una política de seguridad y defensa", dijo un portavoz.