Lo que le sucedió ayer al murciano Luis León Sanchez es el paradigma de la desgracia desportiva y un ejemplo más de lo mal que le están saliendo las cosas a la delegación española en Londres. El tercer clasificado en la última contrarreloj de Tour rompió la cadena en la primera pedalada, en la misma rampa de salida, y luego sufrió un pinchazo en el kilómetro 14 y tuvo que cambiar por segunda vez de bicicleta al romper el cuadro tras coger un bache. Luisle Sánchez finalizó en el puesto 32º, a mas de seis minutos del británico Bradley Wiggins, mientras el otro español, el joven Jonathan Catroviejo, no sufrió percances y eso le permitió acabar noveno, a 2.49 minutos del nuevo héroe del ciclismo británico, que compartió podio con el alemán Tony Martin (a 42 segundos) y el británico Chris Froome (a 1.08 minutos).

"Llegaba en mi mejor momento sobre una bicicleta", se lamentó el ciclista del Movistar, ejemplo de un infortunio por avería que también sufrió Rafa Trujillo en las dos primera regatas de la clase Finn de vela. "Me ha sucedido de todo, en ninguna otra carrera había sufrido tantos percances", reiteró Luisle .