La policía ha detenido a tres personas a las que se les acusa de secuestrar a un camionero. El objetivo de este secuestro era obligarle a transportar droga desde Andalucía con su camión.
Se da la circunstancia que J.M.G.M., de 31 años, y que el miércoles día 1 recibió un disparo de pistola en la cabeza, fue una de las tres personas que secuestró a J.L.T.R., de 36 años, y de profesión camionero. El disparo se produjo en un forcejeo entre ambos en el que el camionero logró huir.
El pasado miércoles la policía recibió una llamada del hospital informando que un joven había ingresado en Urgencias con un tiro en la cabeza.
El joven era de Cáceres y presentaba una herida por arma de fuego en el cuero cabelludo con un orificio de entrada en la zona occipital y sin orificio de salida. Estaba consciente. Varios agentes se desplazaron al hospital para hablar con él, ya que se lo llevaban al Infanta Cristina.
Según la versión del herido, la agresión se debió a un ajuste de cuentas por unos problemas económicos entre la víctima y el agresor. A la vista de estas declaraciones y en colaboración con la policía de Cáceres, se organizó un dispositivo para localizar al camionero, que se presentó al día siguiente en la Comisaría de Cáceres con su abogado. Fue detenido por un delito de homicidio en grado de tentativa.
Pero su declaración y la posterior investigación de la policía dio un vuelco al caso, ya que J.M.G.M., herido de bala en la cabeza; junto con su cuñado, J.M.P.N., de Cáceres y de 32 años, y un amigo de éste, G.M, de Francia, introdujeron al camionero, en contra de su voluntad y amenazándole con pistolas, en un vehículo y lo trasladaron a un piso de Mérida para obligarle a realizar un transporte de droga desde Andalucía en su camión. El camionero intentó escapar de sus secuestradores, pero al ser descubierto por J.M.G.M. quiso retenerlo apuntándole con una pistola. Hubo un forcejeo con varios disparos, uno de los cuales alcanzó al secuestrador.
