No es normal que un empresario se le nombre Hijo Adoptivo de una población por su comportamiento con los empleados. El alcalde de San Pedro de Mérida Pedro Lanzas y la corporación municipal en pleno han nombrado Hijo Adoptivo al empresario Eduardo Valdés Mínguez por su comportamiento con los obreros de esta población y que da empleo a muchas personas durante el año.

A Eduardo Valdés le conozco hace muchos años, en 1963 me llevó a tomar posesión como maestro a mi primer pueblo, resulta que se habían equivocado el nombramiento y después me dieron Palazuelo, un pueblo de colonización que no estaba entonces habitado, él tenía coche y siempre estaba a disposición de que algún amigo lo necesitara.

Hemos pasado buenos momentos, incluso el nacimiento de su primer hijo y paseamos calle Santa Eulalia arriba y abajo con la preocupación de qué sería, él quería un niño y así fue, luego vinieron 7 más, que con su mujer Isabelita Marín han sido toda su vida.

Eduardo es una persona que no pasa desapercibida. Entrañable. Cascarrabia. Trabajador incansable y espléndido. Sus obreros le adoran. Todos forman parte de la familia Valdés. Este año estoy abastecido de fruta y me encanta ir con él y recorrer esa finca que divide la carretera N 630 y ves una parte de frutales en zona de regadío y otra que ya es parte de Parque Natural de Cornalvo. Hijo Adoptivo por nombramiento popular no es normal, pero es que mis amigos de copas y años son así, únicos. Enhorabuena Eduardo, aunque me haya enterado tarde me ha encantado la noticia.