La Policía Nacional investiga la procedencia de una carta con «polvos sospechosos» que llegó ayer a la sede de la UNED. Tras percatarse de que el sobre contenía una sustancia desconocida, los trabajadores del centro dieron aviso al 112, que activó el protocolo de seguridad fijado para estos casos alrededor de las 14 horas. En principio se pensó que los polvos amarillos podrían ser «una sustancia irritante», pero finalmente el susto quedó en nada y todo a punta a que se trata de «una broma». La policía, no obstante, está analizando la sustancia e investigando la procedencia del sobre.

Hasta el lugar se desplazaron la policía nacional, los bomberos y personal sanitario, acordonando la zona e impidiendo el paso a la calle Moreno de Vargas. La presencia de los cuerpos de seguridad no pasó de inadvertida para los ciudadanos, que se acercaron al lugar a ver qué ocurría.